Naturaleza
Investigadores chiricanos realizan inusual descubrimiento en población de ranas
Los científicos hallaron toxinas en la piel de la rana Pristimantis Gaigei, un paso que abre el compás para importantes estudios en el campo de la evolución y farmacia.
- Karol Elizabeth Lara
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- - Actualizado: 13/10/2020 - 11:25 am
En los bosques húmedos tropicales de Panamá, una pequeña rana saltaba entre las sombras de la noche guardando consigo un secreto.
Se trata de la Pristimantis gaigei, una ranita de lluvia que los científicos creían que no tenía toxinas en su piel y que como parte de su estrategia de defensa utilizaba el mimetismo batesiano.
Sin embargo, esta teoría dio un giro importante luego de que un grupo de investigadores de la Universidad Autónoma de Chiriquí (Unachi) realizara un estudio con este anfibio, que arrojó nuevos hallazgos.
Abel Batista, Karol Gutiérrez y Roger Morales encabezaron esta investigación en la P. gaigei. Los expertos bautizaron su trabajo como: "Descubrimiento de alcaloides en la piel de la rana Pristimantis Gaigei, indicios de mimetismo mülleriano en dos poblaciones de Panamá". Los resultados indican entonces que, además de tener toxinas en su anatomía, su mimetismo no es batesiano, como se describe en algunos libros.
¿En qué consisten estos conceptos? Con el mimetismo batesiano la rana adopta una coloración llamativa tomando como modelo una rana venenosa, en este caso la Phyllobates lugubris, para hacerles creer a sus depredadores que también es peligrosa, cuando no es así.
Con el mülleriano, en tanto, ambas especies son peligrosas y su modelo de defensa es químico, el cual contrarresta a microorganismos con moléculas bioactivas y a potenciales depredadores, debido a que por las toxinas su piel puede tomar un sabor desagradable e incluso ser letal.
Batista, biólogo y miembro del Sistema Nacional de Investigación, destacó que la P. gaigei es una especie nocturna y rara, que poco se observa. A ellos les llamó la atención las características físicas que comparte con otra rana, la cual tiene un comportamiento opuesto.
"Es negra y tiene unas franjas llamativas. El patrón es interesante, porque en Panamá también encontramos otra rana con colores similares, pero diurna y venenosa. Según las teorías se dice que esta nocturna es un modelo de esa rana venenosa. Siempre se mantuvo la teoría de que las gaigei no eran venenosas o no tenían alcaloides o toxinas en su piel. Nos llamó la atención la relación entre estas ranas", precisó Batista.
Agregó Batista que estos hallazgos contrarrestan la teoría del mimetismo batesiano, el cual le asignaban a la gaigei, y refuerza el del mülleriano.
Los retos de la siguiente fase
Tras descubrir que esta rana no es tan inofensiva como se pensaba, los investigadores ahora deben demostrar de dónde vienen y cómo actúan los alcaloides presentes en la piel del anfibio.
Gutiérrez, encargada de la parte química del estudio, detalló que aún tienen que hacer pruebas para aclarar estos puntos.
"Todavía no sabemos cómo están adquiriendo los alcaloides de su piel, si ellos están modificando los compuestos porque no hemos llegado a elucidar las estructuras como tal, ni tampoco hemos estudiado comportamiento alimenticio para saber si los adquieren a través de la dieta, que es lo más probable. Hay que hacer pruebas toxicológicas para ver su potencial bioactivo y si es efectivo para contrarrestar depredadores", puntualizó Gutiérrez.
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La joven científica además subrayó que la investigación en el aspecto químico es más costosa que a nivel de la fase de campo y que aspiran a utilizar otros métodos a futuro, a fin de evitar que se tenga que sacrificar el animal.
En este caso, por el ser el mecanismo más accesible, la rana murió. Para desarrollar el estudio los expertos tenían el permiso correspondiente del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) y los ejemplares se obtuvieron de Bocas del Toro y Panamá Oeste.
Importancia del estudio
Comprender la naturaleza y el comportamiento de sus inquilinos es clave. Estudiar estas ranas no solo ayuda a conocer el estatus de los ecosistemas, sino que puede aportar beneficios para la fabricación de medicamentos.
Batista resaltó que es un indicio de que los bosques están más o menos bien si las gaigei, en conjunto con otras especies, están presentes. La investigación también contribuye a la protección de la población de estas ranas.
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"Son portadoras de moléculas exclusivas de alcaloides, que en otras especies han sido obtenidos para el desarrollo de medicamentos. Abre el compás para estudios de comportamiento, evolución y farmacológicos. Además para colaboraciones entre científicos panameños e internacionales", sentenció Batista.
Por su parte, Gutiérrez les extendió una invitación a los jóvenes para que se interesen por la ciencia y reconoció que es importante que las investigaciones no solo sean atractivas para los expertos, sino que tengan un impacto en la sociedad.
Investigadores de la Universidad Autónoma de Chiriquí hicieron importantes descubrimientos en la rana Pristimantis gaigei. Los estudios ponen a Panamá en el radar internacional para futuras colaboraciones científicas. Conoce más este viernes en https://t.co/olT9xMvYBd pic.twitter.com/g4x9PoZ7p5— PanamáAmérica (@PanamaAmerica) October 9, 2020
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