Legisladores del futuro
Además de evitarnos las molestas protestas, consultas poco efectivas y la normalidad del “error” que el humano comente involucrando sentimientos personales en decisiones globales, podríamos hacer muchísimo más barato, más participativo.
- Bosco José Rodríguez Espino
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- - Publicado: 31/3/2020 - 12:00 am
Tengo de vida, los años que tengo de escuchar quejas, participar en manifestaciones, de escuchar el "prohibido olvidar", de sentir que le debemos a la patria honestidad y un sinfín de valores éticos extra. No es algo anormal, incluso son noticia todos los días, y nos acostumbramos a ello, es decir a leerlas y simplemente aceptarlas.
Considerando que nací algunos años después de la dictadura militar que hubo en Panamá, pero antes que las computadoras llegaran a los colegios, me atrevo a decir que la tecnología cambió la vida de todos, y está cambiando el futuro que esperábamos con autos voladores, ahora no solamente queremos que vuelen, sino que no contaminen y así nos hemos ido adaptando a los cambios de la globalización y la comprensión social.
Dicho lo anterior, se refuerzan las intenciones del ser humano en dejar menos cabos sueltos y resolver sus inquietudes con respecto a los servicios y equipos que queremos para nosotros mismos, para nuestra tranquilidad y la solución a problemas esperados e inesperados. Uno de esos grandes problemas es la falta de ética y valores a la hora de gobernar un país, administrar justicia y legislar positivamente para el desarrollo político efectivo.
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Por lo que si unimos tanto la tecnología, como nuestros problemas de legislación podríamos sacar un resultado mucho más efectivo, tan efectivo como la velocidad y eficiencia de una calculadora, y ¿Por qué menciono calculadora? Simplemente porque con una tecnología que se llama "Inteligencia Artificial" o sus siglas "IA" podríamos resolver esos errores en fallas morales que el ser humano suele cometer, por ejemplo: Hoy día podemos ordenar comida ya no únicamente por teléfono (se cae la llamada o te cuelgan), no solo a domicilio (un accidente), ni solamente por la computadora (no hay luz), sino que incluso podemos escoger perfectamente dónde, cómo y cuándo va a llegar a nuestro destino (algoritmos), de cualquier restaurante, y desde la comodidad de un teléfono (la máquina amiga del ser humano).
Conociendo que la inteligencia artificial puede simular sistemas informáticos con respecto al comportamiento humano, es decir, escoger opciones viables o importantes (imagine Uber, Waze, Google, etc…), con autoaprendizaje y conclusiones parciales o definitivas; ¿por qué no comenzar a hablar de "Legisladores con Inteligencia Artificial"? además de evitarnos las molestas protestas, consultas poco efectivas y la normalidad del "error" que el humano comente involucrando sentimientos personales en decisiones globales, podríamos hacer muchísimo más barato, más participativo y más democrático el proceso de propuestas y aprobaciones de proyectos de ley.
Seguramente se están preguntando: ¿Cómo puede una computadora saber qué necesita mi país y además de eso escoger la mejor opción? Podríamos simplemente decir que: "Cada vez que estoy dando una pulsación a este teclado, la computadora está aprendiendo y conociendo lo que pienso, palabra por palabra, código por código, tecla por tecla, molestia por molestia, satisfacción por satisfacción y algoritmo por algoritmo".
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Las máquinas pueden reconocer errores mucho más rápido que un humano, pero no son capaces de aprender de manera asociativa, sin embargo entre más alimentemos el mundo tecnológico con el sentimiento humano, estaremos sensibilizando mucho más a aquellas máquinas, que no se cansan, no roban, no matan, no gritan, y si cometen errores, estos pueden ser medibles, predecibles y reparables.
Estos algoritmos son muy buenos para los temas a los que están definidos y diseñados, pero únicamente para esos temas, los humanos somos capaces de ver una imagen mucho más panorámica de cada asunto, por lo que es inmensamente improbable que con una tecnología muy próxima podamos pensar que las máquinas nos van a gobernar, pero lo que si podemos medir es que las computadoras no nos van a tomar los impuestos de nuestras arcas y luego meterlos en sus arcas, partiendo por el principio que las máquinas no requieren vivir en sociedad o conducir un auto de cien mil dólares.
Finalmente dejar la semilla de la esperanza, sabiendo que las tecnologías de inteligencia artificial está yendo encaminadas en pilares que los humanos deberíamos poder aplicar sin problema, pero indudablemente en el mundo político nunca ha sucedido y son: 1. No discriminación (Justicia), 2. Responsabilidad de consecuencias, 3. Accesibilidad para todo mundo (Transparencia), y 4. Valores Cívicos (Ética).
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