Una fiscalía sin prueba ni testigos sucumbe en caso de comida deshidratada
La exministra explicó todo lo vivido, en un episodio de persecución por parte del Ministerio Público para tratar de culparla en este caso.
La exministra explicó todo lo vivido, en un episodio de persecución por parte del Ministerio Público para tratar de culparla en este caso.
Lucy Molinar acudió al Colegio Nacional de Abogados para explicarles a los directivos del gremio toda la encrucijada que ha vivido por este proceso penal. Víctor Arosemena
Un Ministerio Público pobre de argumentos, sin testigos y como única prueba una auditoría pobremente explicada por los peritos, dio como resultado la absolución de cinco implicadas en el caso de las comidas deshidratadas, entre estas la exministra de Educación Lucy Molinar, en la madrugada de ayer.
El abogado de la periodista, Jair Urriola, comentó que cinco peritos de la Contraloría General no pudieron sustentar un informe de auditoría "amañado", en el que se estableció una supuesta lesión patrimonial, pero que después resultó una auditoría de cumplimiento.
"Como por cinco años, se ha sometido a Lucy Molinar, a un proceso por una supuesta lesión patrimonial, en una causa en donde ahora los peritos dicen que lo que estaban analizando eran debilidades administrativas", sostuvo el jurista.
Lucy Molinar comparó este caso, como el vivido con el expediente sobre las mochilas escolares, del cual también ha salido librada hasta el momento, ya que el caso fue apelado.
VEA TAMBIÉN: Una fiscalía sin prueba ni testigos sucumbe en caso de comida deshidratada
"Ah no!, primero era sobrecosto, después no hubo, entonces el transporte, no la distribución, al final hicieron una 'parrampampanada' en una audiencia que perdieron", destacó la exministra.
Para Lucy Molinar, esto demuestra que el Ministerio Público, cuando no tenía caso, "estiraba el cordón, al punto de someter la justicia para cumplir el objetivo que se le había trazado, que era procesar a alguien que previamente había sido decidido".
VEA TAMBIÉN: 'No vengo a servir a ningún poder político', afirma el procurador ratificado, Eduardo Ulloa
La periodista acudió en compañía de su apoderado legal al Colegio Nacional de Abogados, para hablar con directivos del gremio y explicar toda la encrucijada que ha vivido por este proceso penal.
Lucy Molinar, quien ha escrito un libro y se ha comportado en forma mesurada durante todo este tiempo, manifestó que ya calló por mucho tiempo, esperando que la justicia haga su trabajo y que ahora nadie le va a impedir que hable.
"Cómo puedo quedarme callada ante aberraciones tan grandes como las que vivimos ayer, cuando vemos que una fiscal miente, reiteradamente. En el proceso de mochilas mintió pero sin asco, y en este proceso miente pero sin asco y para cuidarle la espalda, sale un fallo del segundo tribunal que dice que el fiscal en audiencia preliminar no está bajo la gravedad del juramento", comentó.
La audiencia estaba planificada para durar cuatro días, pero ante la falta de elementos de convicción por parte de la fiscalía se simplificó.
"Después que terminaron de hablar los peritos de la Contraloría, todos los abogados dijeron 'es que ya no vale la pena seguir con estos'. El proceso se suspendió, entrevistaron a dos personas más y se fueron a los alegatos", contó Lucy Molinar.
El abogado Urriola lamentó que el Ministerio Público haya apelado la decisión del juez, después de lo acontecido, ante el Segundo Tribunal Superior de Justicia.
"Insisten en malgastar los dineros públicos, sometiendo a la Administración de Justicia a las siguientes etapas", declaró.
A manera de anécdota, la exministra comentó que este caso fue llevado, inicialmente, por la fiscal Vielka Broce, luego por Tania Sterling y el que acudió al juicio fue Adecio Mojica que, a su juicio, no conocía el expediente.
"Por ejemplo, no conocía el acta en el que dos meses después de implementado, se suspende el programa (de comida deshidratada)", resaltó.
Al reaccionar sobre lo contado por Molinar, el presidente del Colegio de Abogados, Juan Carlos Araúz, reiteró que la justicia se encuentra en sus niveles más bajos de credibilidad y casos como este son un caldo de cultivo para ahondar esa crisis.
Juan Carlos Araúz reflexionó en que nos encontramos ante un escenario en que estas lecciones deben formar parte de la nueva etapa por los compromisos que se tienen que adoptar en materia de justicia.
Abogó por un sistema de contrapesos, donde uno se pueda quejar y las actuaciones de los agentes de instrucción estén sujetas a supervisión y control disciplinario.
"Nuestro sistema carece de justicia disciplinaria en donde el actuar incorrecto, tenga remedio", resumió.
¡Mira lo que tiene nuestro canal de YouTube!
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.