Panamá
Almejas y mejillones enfrentan serias amenazas
Además de la contaminación, el cambio climático ha generado nuevas limitantes para los bivalvos, que ayudan a mejorar la calidad del agua.
- Karol Elizabeth Lara
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- - Actualizado: 05/5/2024 - 12:00 am
Cuando se menciona a bivalvos como las almejas, ostras y mejillones, la mente de una gran mayoría se traslada a un rico platillo de mariscos, pero estos animales cumplen en los ecosistemas marinos roles importantísimos, que van más allá de servir de alimento.
La profesora Indira Durán, magíster en Gestión Integrada de Áreas Costeras Tropicales, recalca que los bivalvos son organismos filtradores, que eliminan sedimentos y ayudan a mejorar la calidad del agua.
"Los bivalvos entran en el grupo de los moluscos. Ellos, además de filtrar grandes cantidades de agua, participan en el ciclo de nutrientes y la gran acumulación de conchas en las playas también ayuda a evitar la erosión de las costas", expuso Durán.
No obstante, este rol también los expone a muchos contaminantes, los cuales se acumulan en sus tejidos y luego pueden pasar a otros organismos en la cadena de alimentación.
Durán, que ha desarrollado temas de contaminación por metales pesados en bivalvos, precisa que aunque en Panamá no ha detectado concentraciones altas y letales, sí se deben tomar medidas.
"Es un tema de salud pública conocer los niveles de contaminación en estos organismos, que son consumidos por nosotros. No hallé que las concentraciones fueran muy altas, afortunadamente eran concentraciones no letales. En el caso del hierro, que tuvo las más altas concentraciones, no era alarmante porque el estudio se hizo en el Pacífico", comentó.
La experta puntualiza que en el país hay muchas estructuras que se construyen cerca de ríos o costas, como los sistemas agrícolas, talleres, los cuales alimentan de forma negativa los cuerpos de agua, agravando los problemas de los ecosistemas marinos.
"Hay que hacer prohibiciones sobre el lugar en el que se instalan, por ejemplo, las porquerizas, que no deben estar cerca de quebradas. Contar con sistemas de saneamiento de agua, promocionar productor orgánicos y adoptar nuevas tecnologías", manifestó.
Y no menos preocupante es el efecto del cambio climático en los bivalvos. La crisis climática tiene un impacto directo en el agua y por ende en estos animales.
La disponibilidad de agua o cambio en los patrones de salinidad pueden ser factores limitantes para ellos. Durán advierte que estos aspectos también impactarán su distribución.
Además, la proliferación de microalgas nocivas, que luego filtran los bivalvos, derivarían en mortandad de poblaciones.
Los bivalvos constituyen un recurso muy versátil y de gran comercialización. A los 18-24 meses ya son adultos y como crecen rápido, tienen alta cosecha.
Para la docente es fundamental que haya una conexión entre la academia e instituciones que manejan los recursos acuáticos.
Por su parte el estudiante de biología Jonathan Robles subrayó la relevancia sobre que las personas entiendan que esta situación no solo afecta a los bivalvos, sino también al hombre.
"Como jóvenes nos queda influir en las instituciones e implementar estudios de estadísticas en este sentido", dijo Robles durante el webinar realizado en conjunto con Adopta Bosque.
Mientras que la estudiante Sherly Prestan recalcó que urgen acciones, sobre todo porque más del 70 % de la población mundial vive cerca de las costas, resultando en la acumulación directa de desechos y contaminantes en los océanos.
Y en el caso de los bivalvos, esta acumulación de altos niveles de toxinas son mayores debido a que viven enterrados en el sedimento y filtran el agua.
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