Larry Hagman pierde batalla contra el cáncer de hígado

Fue famoso por interpretar al capitán astronauta Tony Nelson en la comedia de televisión de los años 60, “Mi bella genio” y por ser el magnate J.R. Ewing en la serie televisiva “Dallas”, donde se convirtió en un símbolo de la avaricia en la década de 1980.

Hablamos del actor estadounidense Larry Hagman, quien falleció a los 81 años, el pasado viernes, al perder una dura batalla contra una cirrosis o mejor dicho cáncer de hígado que padecía desde 1992.

Pero murió como él quería: rodeado de sus familiares y amigos en el hospital de Dallas y hasta sus últimos momentos estuvo acompañado por la actriz Linda Gray, quien hizo el papel de su esposa en la serie “Dallas” y con quien había desarrollado una profunda amistad por más de 35 años.

“Larry era un gran amigo, llevó diversión a todos quienes lo conocieron. El fue un hombre creativo, generoso, gracioso, amoroso y muy talentoso. Lo extrañaré enormemente”, expresó Gray.

Una vida dedicada a la actuación.
Después de realizar las dos grandes producciones mencionadas en los párrafos anteriores, Larry Hagman fue protagonista también de dos comedias que estuvieron poco tiempo al aire “The Good Life'' (NBC, 1971-72) y “Here We Go Again” (ABC, 1973). Su trabajo en el cine incluyó papeles bien recibidos por la crítica en “The Group”, “Harry and Tonto” y “Primary Colors”.

Pero fue su magistral interpretación del encantadoramente detestable J.R. la que lo llevó a la cima.

El capítulo “Who shot J.R.?” (“¿Quién le disparó a J.R.?”), en la que el personaje de Hagman casi es asesinado, generó un récord de audiencia. Sus 356 episodios los vieron unos 300 millones de personas a nivel mundial y este año se hizo una nueva versión de la exitosa serie.

Primeros años.
El actor nació en Texas , para después de unos años trasladarse a Los Ángeles donde fue criado por su abuela. Su afición por los sombreros era impresionante, ya que tenía en su poder más de dos mil de tipo vaquero.

Después de un breve período de trabajo en el campo, Hagman siguió los pasos de su madre en el mundo del espectáculo e incluso fue de gira y actuó en musicales con ella.

Pero, también sufrió varias caídas a lo largo de su carrera, ya que salió a relucir su adicción al alcohol lo cual comenzó en su etapa juvenil. Y se presume que tuvo 50 años padeciéndolo.

Incluso en las duras jornadas de trabajo en el plató de “Dallas”, consumió cinco botellas de cava por día durante años y finalmente le diagnosticaron cirrosis .

Tres años después recibió un trasplante de hígado y conservó una fotografía del donante del órgano sobre su espejo. “Rezo una oración por él cada mañana”, confesó nostálgico.

Pese a esto, Hagman continuó bebiendo en secreto hasta que otra operación de vida o muerte en el 2003 lo forzó a dejarlo.