Infidelidad y traición durante el embarazo

La infidelidad es una traición que, en cualquier relación de pareja, implicará una crisis e incluso puede ocurrir en la etapa del embarazo.

Según datos de la Contraloría General de la República del 2014, alrededor de 19 mil mujeres panameñas viven en pareja o están casadas a sabiendas de que sus maridos les son infieles.

Esta cifra equivale al 3.3% del total de mujeres entre los 15 y 49 años, y se desconoce qué porcentaje de estas infidelidades se dieron durante el embarazo, indica la psicóloga María Alejandra Delgado.

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Origen

Por lo general, para que se dé la infidelidad durante el embarazo, el hombre suele argumentar insatisfacción sexual y emocional, porque considera que su pareja en estado no satisface sus "necesidades".

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No obstante, realmente el porcentaje de hombres que son infieles a sus parejas durante el embarazo son aquellos en los que la infidelidad es parte de su naturaleza, "el infiel es infiel con o sin embarazo" , señala la también psicóloga Lourdes Avilés.

Cambios

Muchas veces durante el embarazo la mujer pierde el interés sexual, generalmente ocurre una disminución durante el primer trimestre y tercer trimestre del embarazo, sin embargo, las especialistas explican que disminuir no implica que desaparece el deseo o que no se puedan mantener relaciones sexuales.

También se presentan condiciones emocionales especiales como que la embarazada se concentre solo en ella y el hijo que está por llegar, descuidando así a su pareja, que entonces tomará esto como excusa para cometer la falta.

Daños

Para cualquier mujer es difícil afrontar este tipo de traición, provocando en ella la pérdida de confianza y puede tener consecuencias emocionales y psicológicas, y en algunos casos legales.

Las inseguridades que ya venía sintiendo la futura madre se reafirman debido a que durante esta etapa los cambios en su cuerpo pueden hacerla sentir menos atrayente, más insegura y hasta depresiva.

La invade el sentimiento de culpa acompañado de las interrogantes de las causas que originaron esta situación o qué tipo de falla ella cometió, olvidando que en una relación los dos contribuyen para cimentarla con éxito.

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Al darse cuenta de lo sucedido, algunas mujeres deben afrontar, no solo que fue víctima del engaño en un momento de la vida que se espera que sea de tranquilidad y felicidad para la pareja como lo es la espera de un hijo, sino también los cambios hormonales y corporales como más vulnerabilidad emocional, llantos, alteraciones del estado de ánimo, pérdida o aumento del apetito y hasta poner en riesgo a la criatura.

Recomendaciones

Si bien es cierto que el sexo es una necesidad fisiológica tan importante como el comer y el dormir, es posible que frente a la experiencia del embarazo, por prescripción médica la pareja requiera abstenerse de tener relaciones sexuales, lo que les puede brindar la oportunidad de descubrir nuevas formas de intimidad sin que necesariamente se llegue al coito, asegura Delgado.

Otro factor importante dentro de la relación es que la comunicación sea abierta y sincera entre la pareja.

En caso de tener dudas sobre el sexo durante el embarazo, consultar con el médico, ya que pueden haber mitos muy arraigados en torno a este tema que afecte la estabilidad de la pareja como creer que si tienen sexo pueden hacer daño al feto o provocar un aborto espontáneo.

Además es necesario tomar en cuenta que en caso de pasar la página o no se puede buscar asistencia especializada, la que podrá ayudar a resolver la situación o al menos brindar alguna alternativa, porque la infidelidad en cualquiera que sea las condiciones es penoso superarla.

"Existe la terapia de parejas para permanecer unidos o separarse, recuerde que hay un hijo de por medio que demanda a ambos padres, y las relaciones entre ambos deben ser las mejores juntos o separados por el bienestar del hijo", concluye Avilés.