PANAMÁ
Costumbres y tradiciones de Semana Santa que se han perdido
- Belys Toribio
- /
- /
- /
Cada vez es menos frecuente que las personas crean o sigan 'al pie de la letra' las costumbres y tradiciones sobre la Semana Mayor.
PANAMÁ
Cada vez es menos frecuente que las personas crean o sigan 'al pie de la letra' las costumbres y tradiciones sobre la Semana Mayor.
Cuántos han escuchado a sus abuelos e incluso a sus padres, decir que en Semana Santa "no se puede ir al río o a la playa porque te conviertes en pez" o que "no se puede subir árboles porque te podrías convertir en mono". Estas creencias forman parte de las costumbres y tradiciones de la Semana mayor.
Los abuelos también suelen decir que cuando un árbol no da frutos, hay que pegarle o "darle rejo" en Viernes Santo; también se cree en la posibilidad de que un árbol sangre si lo cortar; y el viernes Santo se acostumbraba a dar "rejo" a alguien estando aún en la cama para que se portara bien el resto del año, estas y otras creencias pueden venir a la memoria de los panameños en para esta Semana Mayor.
Lo cierto es que cada vez es menos frecuente que la gente las crea o las siga "al pie de la letra", es decir, con el pasar del tiempo varias costumbres y tradiciones de Semana Santa se han perdido.
El periodista y folclorista Ariosto Velásquez comenta que la pérdida más significativa que se ha registrado es en el aspecto culinario, antes se solía hacer mucho para Semana Santa las llamadas "bicheras", como se dice en el interior, lo cual consistía en la preparación de ciertos platillos, sobre todo dulces.
Se preparaba cocada, dulce de pepita de marañón, huevito de leche, bienmesabe o pan bon. Velásquez explica que preparar en casa algún dulce tradicional era parte fundamental de la celebración de la Semana Mayor.
El folclorista detalla que las procesiones también han mermado bastante, y no es algo de ahora, desde antes de la pandemia, muy pocos pueblos aún siguen con esta tradición.
Las procesiones conmemoran la pasión, la muerte y la resurrección de Jesús, se escenifican los últimos momentos de Jesús en la tierra y su resurrección. En los lugares que aún se hacen, es organizado por los habitantes del pueblo y comúnmente los visitantes asisten a ver la procesión.
En Arraiján, por ejemplo, se realizaba la procesión y era catalogado como un evento "multitudinario", pues se hacía con mucha devoción. Históricamente el distrito de Pesé también escenificaba la Pasión de Cristo.
VEA TAMBIÉN: Susan Castillo insta a la población a no bajar la guardia contra la covid-19 en Semana Santa
Otra tradición que con anterioridad hacían mucho era visitar 12 templos. Velásquez comenta que muy pocas personas se toman el tiempo de visitar 12 iglesias un jueves Santo, comúnmente lo hacía las personas que viajaban de la capital al interior durante la Semana Santa.
Velázquez indica que más allá de las creencias todas estas cosas son tradiciones culturales que se han echado al abandono, aunado a que hay una generación que no le ve el valor a estás costumbres o tradiciones.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.