Panamá
¿Qué tradiciones navideñas han quedado en el olvido en Panamá?
- Vivian Jiménez
- /
- [email protected]
- /
- @PanamaAmerica
Las fiestas decembrinas empiezan a pasar desapercibidas para muchas personas.
Noticias Relacionadas
La celebración de la Navidad en Panamá ha sufrido múltiples cambios en los últimos años, la festividad ya no despierta la misma alegría y efusividad entre la población, inclusive desde antes de pandemia muchas de las tradiciones empezaron a modificarse, transformando la manera en cómo los panameños festejan la Nochebuena.
Anteriormente, la llegada del mes de diciembre se vestía de brillo, luces, pintura, emoción y amabilidad, las familias organizaban con mucha anticipación sus compras y escogían el lugar en el que iban a pasar las fiestas, no obstante, estos elementos poco a poco han ido quedando en el olvido.
Las fiestas decembrinas empiezan a pasar desapercibidas para muchas personas, los vestuarios, por ejemplo, han dejado de ser ostentosos para dar paso a la comodidad, las pijamas se han convertido en las preferidas de los panameños durante la noche del 24 de diciembre, sobre todo, si es a juego con el resto de la familia.
Ello no quiere decir que el movimiento comercial propio de la época haya disminuido, todo lo contrario, se mantiene inclusive en los momentos de mayor estrechez económica, no obstante, la exigencia de vestir ‘ropa de marca’ ha pasado a un segundo plano.
Así mismo fue reemplazada la figura de Santa Claus, un personaje creado para mantener la inocencia de los más pequeños, por duendes que los motivan a portarse bien para recibir sus juguetes en Navidad.
Artículos que en la actualidad son meramente tecnológicos, ya que, las exigencias de los infantes van desde celulares, tablets, audífonos y consolas de videojuegos hasta relojes inteligentes, gafas de realidad virtual, drones, cámaras instantáneas y minis proyectores portátiles.
Hasta la hora en la que se entregan dichos obsequios ha cambiado, ya no se forran ni resguardaban hasta la mañana del 25 de diciembre para sorprender a los más pequeños, sino que se abren la noche anterior.
Otro de los aspectos que ha sufrido alteraciones es la cena navideña debido a los altos costos de algunos productos y facilidad de las industrias, el guandú, por ejemplo, ya no es indispensable en los hogares panameños, inclusive hay familias que adquieren menús navideños completos ya preparados para reducir los tiempos en la cocina, desplazando un poco esa tradición de preparar la cena en familia.
A juicio de la abogada y activista Cristel De León, la sociedad panameña actualmente vive una Navidad en carencia, sobriedad y austeridad debido a la crisis estructural del régimen político y social que enfrenta el país.
Destaca que la ‘parafernalia’ que solía acompañar las celebraciones ha disminuido producto de la falta de dinero y un cambio de mentalidad que prioriza otras necesidades como salud, alimentación y educación.
De León señala que la saturación de información que surge de las redes sociales ha cambiado la narrativa en torno a la Navidad proveniente de las creencias religiosas, haciendo que, en lugar de celebrar el nacimiento del Niño Dios, los panameños se enfoquen en festejar una “época de compartir” o “las fiestas de fin de año”.
Pese a los cambios e influencias extranjeras es importante que los ciudadanos conserven sus costumbres y tradiciones navideñas, recordando que no es necesario invertir grandes sumas de dinero para tener una buena velada, lo relevante es compartir con quienes más lo necesitan y reflexionar sobre el verdadero significado de las fechas.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.