Sociedad
Sobre las falencias en la seguridad de las cárceles, por ejemplo, el pasado 25 de septiembre se realizó una requisa en el Centro Penitenciario La Joyita, donde se encontró desde refrigeradoras hasta consolas de videojuegos en manos de los privados de libertad.
En medio de la ola de violencia y aumento de la criminalidad que vive el país, el Gobierno ha anunciado la construcción de más centros penitenciarios, como parte de su estrategia interinstitucional de seguridad, y ante el clamor de la población que exige acciones puntuales.
En este sentido, el titular del Ministerio de Gobierno (Mingob), Carlos Romero, confirmó ayer que para el próximo año se tiene proyectada la construcción de la nueva cárcel de Colón, el nuevo Centro Femenino de Rehabilitación en Pacora, así como el Centro Penitenciario de Darién.
Pero más allá de la edificación de nuevos penales, las quejas de la población van orientadas hacia la falta de seguridad interna en los centros penitenciarios que ya funcionan, así como el poco tiempo que los delincuentes pasan tras las rejas, en parte producto del sistema garantista que funciona en la actualidad.
Sobre las falencias en la seguridad de las cárceles, por ejemplo, el pasado 25 de septiembre se realizó una requisa en el Centro Penitenciario La Joyita, donde se encontró desde refrigeradoras hasta consolas de videojuegos en manos de los privados de libertad.
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También se ubicó droga (presunta marihuana y cocaína), 7 armas de fuego, 200 municiones y múltiples celulares.
Las nuevas autoridades también están al tanto del descontento de la población frente a la ventaja que algunos delincuentes (incluso atrapados infraganti) le están sacando al Sistema Penal Acusatorio (SPA).
Al respecto, el ministro de Gobierno prefirió no referirse a esas quejas, dejando su abordaje a las instancias correspondientes. Pero sí se refirió ayer a los planes de resocialización con la población carcelaria del país.
"Mi parte es resocializar. Y por más que aumentemos las penas, tarde o temprano las personas van a salir a la sociedad", señaló el ministro Carlos Romero.
En el programa televisivo Cara a Cara, el funcionario insistió en que "lo más importante es la resocialización", aunque reconoció que "con algunas personas es más difícil" este proceso, que se supone es el que se realiza dentro de las cárceles.
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Reiteró que el próximo año se trabajará en la nueva cárcel de Colón, que albergará a unos 1,700 privados de libertad.
Y además de los centros penitenciarios de Chepo (para mujeres) y Darién, señaló que en la proyección también entra la cárcel de La Chorrera. "Pero por ahora vamos a iniciar con Colón y Darién; con los próximos presupuestos trabajaremos la cárcel de Panamá Oeste", adelantó.
Pero a propósito del anuncio de más cárceles, el investigador social Gilberto Toro advirtió que esto no representa la solución al problema actual de inseguridad o aumento de la criminalidad.
"Ya está comprobado a nivel mundial que la existencia y construcción de cárceles no remedia nada. Lo único que esto promueve son más espacios para meter a más y más delincuentes en proceso", dijo.
El investigador social recordó que en los países donde se ha logrado dar un giro positivo a los niveles de criminalidad, ha sido como resultado de la "prevención del delito", y no con el tratamiento per se del delincuente, ni menos con la edificación de muchos centros penitenciarios.
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