Panamá
Banda de Música Herberto López retoma su éxito basado en disciplina y el respeto tras dos años de pandemia
"Los chicos están listos, no ha sido fácil, hemos estado al límite, pero están preparados", así describe el director de la banda, Irving Rodríguez, el entusiasmos que tienen la delegación de aproximadamente, 160 jóvenes que prometen un exclusivo repertorio repleto de música y ritmo nacional durante estas festividades patrias.
- Miriam Lasso
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- - Actualizado: 15/11/2022 - 03:28 pm
Con cerca del 70% de su planta de músicos nueva, con recursos limitados, grandes retos y en medio de un proceso de reconstrucción, la Banda de Música Profesor Herberto López del colegio José Daniel Crespo de Chitré, vuelve a rendir honores a la patria este mes de noviembre.
"Los chicos están listos, no ha sido fácil, hemos estado al límite, pero están preparados", así describe el director de la banda, Irving Rodríguez, el entusiasmos que tienen la delegación de aproximadamente, 160 jóvenes que prometen un exclusivo repertorio repleto de música y ritmo nacional durante estas festividades patrias.
Con invitaciones de Costa Rica, Holanda, Alemania, Italia y México a la puerta, la dirección de la banda de música del colegio José Daniel Crespo ha optado por mantener ese proceso de recuperación y crecimiento, tras dos años de pandemia, para en el momento propicio, emprender nuevamente esa agenda que los llevó en dos ocasiones a la Parada de las Rosas en Pasadena, California, así como a alcanzar importantes reconocimientos nacionales e internacionales.
El director de esta banda de música estudiantil compartió cómo fue la preparación de esta banda y sus estrategias para mantenerla vigente durante el cierre, por dos años, de los planteles educativos.
¿Cómo se preparó la Banda de Música Profesor Herberto López para este 2022?
En esta ocasión ha sido difícil poder retomar todo. Gracias a Dios los muchachos han mantenido el entusiasmo y las ganas de querer estar, pero algo particular, fue que en estos dos años de pausa, que no tuvimos banda, los chicos que estaban en los último años, lamentablemente, no pudieron disfrutar esos últimos años dentro de la banda. Prácticamente, cuando regresamos ya estaban en la universidad. Eran chicos con los que llevábamos años trabajando, se nos fue toda esa experiencia en un abrir y cerrar los ojos, en cuestión de nada perdimos muchos estudiantes y nos quedamos con un grupo bastante nuevo, con los que hemos estado trabajando y haciendo todo lo posible. El asunto con la banda es que ya llevábamos una trayectoria, una técnica de hacer las cosas, un estándar elevado en cuanto a la música, el desempeño, y hacer que el chico nuevo se adapte es difícil, porque siempre lo hacemos paulatinamente a través de generaciones, y en esta ocasión, lo tuvimos que hacer con un 65% a 70% de estudiantes nuevos.
¿Cómo fue el trabajo con esa plata estudiantil totalmente nueva?
Estoy muy orgulloso y feliz porque los chicos han sabido aceptar todo este gran reto, que es el asumir la banda. No hemos parado, durante meses trabajando en la música, en las técnicas, en la resistencia de ellos. Gracias a Dios hay banda y podemos decir que vamos a ir a las presentaciones con una buena banda y muchachos entusiasmados, convencidos de que pueden lograrlo.
Además de la pérdida prematura de talento, ¿de qué otra manera les afectó la pandemia?
La afectación más grande que hemos tenido es con los instrumentos. Los instrumentos estuvieron sin uso por un largo periodo y cuando un instrumento musical no se utiliza empieza a tener desperfecto. Durante todos estos meses hemos luchado con esto, poco a poco hemos tenido que ver de qué manera encontramos el recurso para poder mandar a reparar los instrumentos que sufrieron daño, darle mantenimiento y el seguimiento que los instrumentos necesitan. Gracias a Dios, no solo hemos estado retomando lo que son los ensayos, también las presentaciones, hemos tenido invitaciones en todas las áreas, procesiones, en la ciudad de Panamá y en Chitré, a través de esta exposición hemos estado buscando recursos para poder mantener la banda. Obviamente, el tema económico es algo que también nos golpeó y se ve reflejado en la decisión de que este años la banda y toda la delegación del colegio Jose Daniel Crespo se va a estar presentando con el uniforme del colegio, inclusive la ministra de Educación lo sugirió de esta forma, nosotros lo seguimos por eso, pero también conociendo la situación familiar de cada estudiante. De pronto había estudiantes que podían asumir el costo del uniforme, pero para otros era demasiado complicado. Estamos convencidos de que lo que tenemos que seguir trabajando es en el crecimiento, y ellos están orgullosos de su uniforme, eso es importante.
¿Cómo se financia la banda?
En cuanto al financiamiento, la banda se maneja completamente a través de autogestión, a traveé de las presentaciones nos dan algunos donativos, tenemos ciertos padrinos que han apoyado la banda por mucho tiempo, que nos siguen ayudando con el tema del brindis para los muchachos cuando terminan la presentación, el tema de los buses para la movilización.
¿Tuvo la pandemia un peso en la conformación de la banda?
Nosotros veníamos de una banda de más de 200 estudiantes, con participaciones internacionales con 220 a 240 estudiantes y actualmente, la banda la conforman 160 estudiantes, bajó en número, por el balance que tenemos por la cantidad de estudiantes nuevos. La conformación de la banda se mantiene igual y está funcionando.
¿Cuáles son esos logros de la banda?
Este años la banda tiene 55 años. Por más de 40 años la banda se mantuvo pequeñita, pero asistía a todos los evento protocolares del área de Chitré, un poco pasado los 40 años, empezó la gran revolución, la banda creció, comenzó a mostrarse un poco más y vinieron presentaciones internacionales. Tuvimos la oportunidad, cuando yo estaba tocando en la banda en el 2003 en Costa Rica, en un intercambio cultural, luego vino la gran oportunidad a la que nos atrevimos a concursar y participar en el Desfile de Las Rosas en el 2014, esto le da mucha más proyección y aceptación internacional al grupo, luego en el 2018 nuevamente estuvimos en Pasadena, ese mismo año en Costa Rica en el Desfile de la Luz; en el 2019 en Colombia en el concurso de la Feria de Flores en Medellín donde obtuvimos muchos premios y el premio máximo del concurso, que por primera vez se los llevó una banda internacional. Hemos recibido muchas invitaciones internacionales, pero como se entenderá, se tiene que ver con mucho cuidado, somos una institución pública y nuestros estudiantes son de recursos limitados. Antes de la pandemia, estábamos rumbo a un viaje internacional a Italia a un concurso internacional, ya estaba todo preparado y no se pudo realizar.
Cuando asumió la dirección usted tenían solo 21 años, ¿cómo es mantener la mística y las relevancia de esta banda?
Tuve el gran privilegio de ser la última generación que atendió el profesor Heberto López. En su último año dirigiendo la banda tuve la oportunidad de conocerlo y ver su forma de trabajo, muy inspirador, alguien que a pesar de tantos años de trayectoria se dedicaba y pensaba en cada estudiante como alguien muy importante. No se trata de una gran masa de estudiantes como se ven en la calle, son jóvenes que necesitan la atención y nos encargamos de eso. Siempre he pensado que la banda funciona gracias al respeto que tenemos por cada estudiante. Si yo respeto a los chicos, ellos me respetan también. Yo no he tenido que ir por la vida pidiendoles que hagan lo que yo diga, si no que ellos saben y confían y respetan lo que yo les diga porque saben que todo se fundamenta en el respeto y confianza. Me siento muy orgulloso de poder decir que la banda no es solo una fábrica de músicos, si no que a través de ella, tenemos grandes lecciones para la vida, conocemos gente y amigos que nos va a quedar para toda la vida.
¿Cuál es el perfil de los integrantes de la Baherlo?
Después que tengan ganas de participar, ni siquiera tienen que mostrar grandes habilidades con la música. Siempre que tengan la intención de querer esto funciona y con el tiempo cada estudiante se va adaptando a lo que la banda es. Yo siempre he dicho que la banda es un tren que ya va en marcha, pasa que cuando los chicos llegan van descubriendo, pero cuando ya se suben a ese tren sigue adelante, saben lo que hay que hacer y el mecanismo para que todo funcione. Si tuviera que describir cómo es el estudiante que ya pertenece a la banda, pues son estudiantes muy dedicados que saben organizarse con todo, con la familia, la escuela y poder participar en la banda.
¿Cómo sostuvo ese grupo, mantenerlo entusiasmado a pesar de la pandemia?
Nos mantenemos comunicados con ellos, en todo momento en contacto, durante un tiempo hacíamos sesiones de Zoom, en un momento que nos dieron la oportunidad abrimos el salón de banda y les permitimos que fueran a buscar los instrumentos. Muchos estudiantes que durante la pandemia y ese encierro se enfocaron en sus instrumentos y yo me quede sorprendido de varios estudiantes que al retornar presencial tenían un nivel mucho más elevado. Luego de tener todo los instrumentos en casa, hicimos varios proyectos, donde por ejemplo, no podíamos desfilar, por cada desfile haciamos videos musicales, ellos tocaban y grabamos casi ocho canciones que grabaron desde sus casa.
¿Que nos trae la banda del colegio José Daniel Crespo este 2022 y cuáles son los proyectos futuros?
Estamos muy felices de que podamos presentar la banda. Yo en particular estoy muy feliz de darme cuenta que se puede reconstruir y de que hay estudiantes que a pesar de que no tienen toda la experiencia tienen las ganas de salir y de adaptarse al trabajo de la banda. Durante todos estos años hemos recorrido mucha música, inclusive antes de la pandemia teníamos un repertorio de música más internacional y en esta ocasión hemos retomado más sobre la música panameña, tenemos otros géneros variados, pero tiene que ver más con música panameña con ritmo y melodía que la gente reconoce.
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