Riccardo Francolini: El cambio, la única solución para Panamá
Las autoridades de los tres órganos de Estado panameño lo que deben hacer es honor y cumplir el artículo 2 de la Constitución de la República de Panamá.
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Riccardo Francolini Arosemena
Sumidos en concurso de problemas sociales en donde el galopante problema del desempleo producto de la desaceleración económica que vive el país desde hace cuatro años, aunado a un bajo rendimiento educativo producto de un sistema de educación colapsado, sumado al grave deterioro de la seguridad en donde los grupos delincuenciales ganan cada vez más terreno, ahora surge un delicado problema que atenta contra una de las principal bases donde se sustenta la democracia panameña: el sistema jurídico.
El reciente escenario público protagonizado por el presidente interino de la Corte Suprema de Justicia, Hernán De León y la Procuradora General de la Nación, Kenia Isolda Porcell, en ningún momento dignifican ni mucho menos le hace honor y reverencia al sistema judicial panameño, que debe sustentarse por su rectitud, transparencia, valentía, conocimiento y en estricto cumplimiento de la Constitución de la República y la ley.
El cambio, la única solución para Panamá, mi articulo de esta semana https://t.co/6YUhHmZ73Z— Riccardo Francolini (@FrancoliniRicca) 21 de agosto de 2018
Sin embargo, ambos se han caracterizado en protagonizar una atmósfera que ha causado más que apoyo a sus conductas, un repudio e indignación porque lo comparan como un enfrentamiento de bajo nivel profesional y ético.
El país se ha convertido en un caleidoscopio de fama negativa porque lamentablemente contamos con tres órganos del Estado que están sumidos en alto grado de descredito y falta de credibilidad por parte de la ciudadanía.
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No puede ser que algunos dirigentes políticos, gobernantes, empresarios, entre otros grupos, sigan promoviendo el sacrificio del sistema jurídico panameño por el sólo hecho de enjuiciar y condenar a una las máximas figuras de la política nacional como es nuestro líder Ricardo Martinelli. Ante el precedente nefasto que están sentando los magistrados y jueces hay que hacer un alto, porque en jurisprudencia le va a hacer mucho daños a los futuros casos que se presenten.
Además, estos casos de entretenimiento de la población en nada contribuyen a resolver los problemas del día a día de los panameños
El panameño de a pie, el panameño común, el de las grandes mayoría lo que busca es que soluciones al problema del desabastecimiento de agua potable, a que se mejore la atención en los hospitales; que las farmacias de los hospitales de la CSS tengan los medicamentos a la hora de buscarlos. Que a familia no se sienta amenazada cada vez que sale a buscar un rato de esparcimiento o entretenimiento.
Las autoridades de los tres órganos de Estado panameño lo que deben hacer es honor y cumplir el artículo 2 de la Constitución de la República de Panamá que señala taxativamente: El poder público sólo emana del pueblo. Lo ejerce el Estado conforme esta Constitución lo establece por medio de los órganos Legislativo, Ejecutivo y Judicial, los cuales actúan limitada y separadamente, pero en armónica colaboración.
Si nuestros gobernantes realmente se apegaran a las leyes y las normas que rigen la sociedad panameña no existiera falta de credibilidad, confianza y esperanza en la población, sin embargo, hay que tomar en cuenta que ya falta muy poco para que esta pesadilla termine y cada Panameño finque sus esperanzas en el cambio, en aquellos hombres y mujeres que le permitieron tener una mejor calidad de vida y un futuro para sus hijos.
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