VERAGUAS. El distrito, considerado uno de los más pobres del país, no cuenta con una fuente sostenible de empleos.
Cañazas, un pueblo que vive del recuerdo de una vieja mina
Los rumores de que la fiebre del oro regresa a este pintoresco lugar siguen aumentando con los días. Analfabetismo, desempleo, alcoholismo, entre otros, son los problemas que agobian a su gente.
Cañazas, distrito de la provincia de Veraguas que posee una población que supera los 20 mil habitantes, otrora conocido como la tierra del oro, hoy día es señalado como un pueblo fantasma y uno de los más pobres del país.
Eugenio Bernal Ortíz, alcalde de Cañazas, aceptó que se le llame de esa manera, según él, porque hay varias razones.
La primera, explicó, es que entre los años 1994 y 1995, con el cierre de las empresas que se dedicaban a extraer oro de la mina Santa Rosa, cerca del poblado, la economía se fue agotando a tal grado, que incluso los habitantes están emigrando a otros lugares.
En tono de tristeza, el alcalde Bernal dijo: “este distrito tuvo un auge económico muy bueno, pero ya no”. “Aquí hubo un movimiento de mucha gente trabajando día y noche, muchos construyeron sus casas, hacían negocios rentables, compraban comida, se vestían bien, el comercio era bueno para todos, pero al irse las mineras por la caída del precio del oro, se fue abajo todo en el pueblo”, recordó.
Hoy día, las autoridades señalan que hay un elevado índice de problemas sociales, entre los que mencionan consumo de bebidas alcohólicas en los jóvenes y hasta en menores de edad, falta de viviendas, caminos de acceso o de penetración, centros de salud sin medicinas o quienes los atiendan, comunidades apartadas con escuelas en muy mal estado.
El alcalde Bernal manifestó que no hay ninguna fuente económica para este distrito que pueda generar ingresos a las familias humildes y de esta forma mejorar la calidad de vida de mucha gente trabajadora.
“Vivimos sobre las minas de oro, pero el pueblo es como un lugar fantasma, porque en las calles se ve gente de manera esporádica, y en los portales de las casas, muy pocas veces”, sostuvo.
Se le preguntó a esta autoridad si conocía de otros problemas sociales de su distrito y señaló que los afecta la falta de viviendas en el mismo centro del poblado, el analfabetismo, desempleo, el consumo de bebidas alcohólicas fermentadas y muchos otros.
Sobre el supuesto incremento de la prostitución clandestina en este distrito, dijo que no le consta, pero hay comentarios de la gente, que también le atribuye eso al fracaso de la minería.
Al alcalde se le consultó si en ese sector las personas y las autoridades estarían dispuestas a permitir que nuevamente llegaran las explotaciones mineras de oro y otros minerales, y contestó: “mucha gente está esperando eso desde hace varios años para que se generen ingresos y nuevamente vuelva el auge económico al distrito de Cañazas”.
Las autoridades municipales reconocieron que en meses anteriores hubo problemas con el suministro de agua potable, pero todo se resolvió luego de que el Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (IDAAN) y la empresa eléctrica realizaran trabajos en el lugar donde se encuentra la planta potabilizadora y ya se resolvió ese problema prioritario.
Igual reconocieron que, en la cuenca del río Cañazas, una empresa realiza los estudios de un proyecto hidroeléctrico.
Cañazas, una pintoresca comunidad campesina ubicada en la provincia de Veraguas, fue fundada por gobernador de Tierra Firme, don Manuel Montrano, en 1757, con el nombre de San Francisco Javier de Cañazas; hoy, la crisis económica afecta a cientos de personas humildes que esperan una mano amiga que les ayude.
Es una historia similar a la que vivieron muchos pueblos del oeste de Estados Unidos cuando la fiebre del oro de California se acabó y, con ello, también el dinero.
Históricamente, el pueblo de Cañazas es conocido por sus famosas riquezas auríferas, las cuales han sido explotadas en diversas épocas. En 1994 se retomó la actividad minera en este distrito, la cual se paralizó debido a la baja internacional en el precio del precioso metal. De acuerdo a los estudios realizados en el distrito de Cañazas, en su corregimiento cabecera existe un rico yacimiento de oro que atraviesa el centro del poblado y la gente espera que vuelva el auge de la explotación minera.
Lo dijo durante la entrevista con este diario.
- Vivimos sobre una mina de oro, sin embargo, desde el cierre de Santa Rosa, la situación económica es crítica en el distrito y eso obligó a muchas personas a emigrar a otras partes del país en busca de una mejor calidad de vida para ellos y sus familias.
- Alcalde
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.