Zarpando nuevos horizontes
- Jaime Figueroa Navarro
- /
- [email protected]
- /
Aventúrese más allá de Tocumen, visite destinos disparejos y variables y oxigene su vida con experiencias.
Una reciente cena en el restaurante Roosters de Winston-Salem, Carolina del Norte, me presentó la oportunidad de un fugaz intercambio con una simpática pareja de Roanoke, Virginia.
Al introducirme, curiosos por mi nombre, sin pepitas en la lengua, indagaron cómo se deletreaba, deduciendo "Yeimi" por Jaime, dando inicio a un diálogo que nos permite rascar el cerebro de extraños abriéndoles un mundo de oportunidades.
Ante todo, acostumbrados a la cultura anglosajona, los gringos solo gozan de una semana de vacaciones anuales y se muestran estupefactos ante la realidad fuera de sus fronteras donde es muy común que los periodos vacacionales se extiendan hasta cuatro semanas.
Esta pareja cincuentona en particular sólo ha viajado a 9 estados aledaños a Virginia y nunca fuera de Estados Unidos. Su visión global se ve entorpecida porque a pesar de gozar de ingresos superiores al resto del mundo, el promedio de los norteamericanos visita 17 estados (de los 50) a lo largo de su vida.
Ello, parcialmente, porque desde su infancia les lavan el cerebro que viven en el mejor país del mundo, un cuarto de su población nunca ha viajado fuera de sus fronteras y más del 50% conoce solo 5 países, captando Europa el grueso de sus visitas.
A pesar de contar con una visión más globalistas, pecamos nosotros de índices similares donde a pesar de contar con una liliputiense geografía, la mayoría de nuestros coterráneos jamás han visitado nuestra mayor y más misteriosa provincia, ese Darién donde Balboa descubre el Mar del Sur, limitando nuestro entorno a visitas de fin de semanas playeros, extendiéndose a Azuero durante carnavales, una que otra visita a Chiriqui, gozando el istmo de riquezas ecológicas, sitios de vibrantes vivencias culturales y posibilidades sin fin.
A pesar de no contar con cifras oficiales de las tendencias de viajes de los panameños, podemos levantar el telón a un incremento en su quijotear a lo largo de la vida, porque resultado de nuestra privilegiada posición geográfica gozamos de mayores posibilidades que nuestros vecinos en viajar, conocer y enriquecer nuestras vidas.
Una limitante es que, al igual que los habitantes de países desarrollados, nuestro estilo de vida se ve influido por hábitos de compra que limitan nuestros presupuestos, por aquello de "la moda", poseer el mejor automóvil, endeudarnos hasta decir no más.
Contando con tantas alternativas, el mundo se convierte cada vez más pequeño, con acceso del aquel "viaje ahora y pague después". Porque al final del camino, la vida son vivencias, no cosas, ni objetos de fatua vanidad.
Aventúrese más allá de Tocumen, visite destinos disparejos y variables y oxigene su vida con experiencias.
¡Mira lo que tiene nuestro canal de YouTube!
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.