Turismo que enamora
Reinventando Panamá
Casi al final de su avenida principal, a mano derecha, estaba el letrero que señalaba la Dulcería Yelis. Allí tuve el dilatado placer de conocer a su propietaria, embajadora de lujo, sencilla y cariñosa, quien se acercó a mi mesa mientras me deleitaba con un jugo de uvita y suculenta empanada. Quedé hechizado por Dalila Vera, desde el momento que le conocí.
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