Opinión
Lazos de amistad que perduran
- Aurelio Martínez
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- Periodista
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Viví como tres años en Paso Canoas en mi adolescencia y participé de la gran fiesta dela Confraternidad Tico-Panameña, algo que se fue perdiendo con el tiempo.
Aurelio Martínez
Quiero iniciar felicitando a la mayoría de las naciones centroamericanas que celebraron su independencia de España el pasado 15 de septiembre y estuve el fin de semana en el sector fronterizo de Paso Canoas, y me pasaron gratos recuerdos por mi mente.
Yo viví como tres años en Paso Canoas en mi adolescencia y participé de la gran fiesta llamada Confraternidad Tico-Panameña, algo que se fue perdiendo con el tiempo, pero que ahora se retoman muchas actividades entre ambos pueblos vecinos.
Recordé que corrí una carrera de 16 kilómetros entre ambos países y que se realizó hace unos 32 años atrás y que debería retomarse al igual que otras actividades que sirven para estrechar los lazos de amistad.
Los 15 de septiembre se realizaban actividades bailables, desfiles y fiesta gastronómica, era muy esperada esa fecha por ciudadanos de ambos países para divertirse y compartir. Esta era la primera parte de la Confraternidad, porque el 4 de noviembre entonces se hacían las actividades en la zona panameña.
El pasado sábado varios ministros de Panamá, entre ellos el de Seguridad Pública, Frank Ábrego, se reunieron con sus pares en el sector de Corredores en territorio costarricense, con el objetivo de coordinar actividades para un fortalecimiento de esos lazos de amistad y de trabajo.
En el pasado han existido algunas diferencias en materia comercial, pero con la nueva administración de José Raúl Mulino todo ha cambiado y eso es importante para fortalecer la seguridad, el turismo, el comercio y otros aspectos.
Los ticos expresaron que estas reuniones son un avance hacia el fortalecimiento de las relaciones. La verdad es que siempre hemos sido hermanos y tenemos que avanzar de la mano para poder afrontar los problemas propios de la región.
Un gran ejemplo de esa coordinación han sido las soluciones a la crisis migratoria que se mantiene en la región y que se han establecido grupos de trabajo encaminados a mantener el flujo constante hacia el norte del continente.
Combatir el crimen organizado con fuerza y determinación, también es otro de los pilares de las autoridades de ambos países y que hasta el momento ha dado buenos resultados. Costa Rica y Panamá, deben caminar de la mano como grandes hermanos que son.
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