La seguridad de un país no depende de hombres, sino de planes
En Panamá debemos medir, con resultados, la efectividad de quienes encabezan los estamentos de seguridad como hacen las grandes ciudades del mundo.
En Panamá debemos medir, con resultados, la efectividad de quienes encabezan los estamentos de seguridad como hacen las grandes ciudades del mundo.
Un periodista le preguntaba afanosa e ilusamente al ministro de Seguridad Pública, Juan Pino, si renunciaría al puesto por la inseguridad que impera en el país. Como si la seguridad de una Nación dependiera de un solo hombre, pensé.
Y en esa forma de pensar, que plantean muchos, radica realmente el problema. Puede venir Superman, Batman, Robocop o el Súper Policía Universal a dirigir la seguridad del país y eso no resolverá el problema.
Se trata de algo mucho más profundo y científico. Es el deterioro creciente de la sociedad panameña y la agudización de una crisis económica que empuja a muchos jóvenes a las garras de la delincuencia en busca de dinero fácil.
He insistido en que Panamá necesita un plan bien orquestado y consensuado de seguridad, que tenga rango de tema de Estado. En Panamá debemos medir, con resultados, la efectividad de quienes encabezan los estamentos de seguridad como hacen las grandes ciudades del mundo.
Si así fuera, Pino y el director de la Policía Nacional, John Dornheim, ya estarían en capilla ardiente. Pero, lamentablemente, no es así. Ningún gobierno post-invasión militar ha discutido y estructurado un plan de seguridad con visión de Estado.
Los cañones de la sociedad deben apuntar hacia eso, ¿quiénes lo encabezarán?, lo podemos discutir después.
Periodista.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.