Análisis
Hostigamiento judicial y la censura periodística
- Miguel Ángel Sánchez Ávila
- /
- opinion@epasa.com
- /
...hostigamiento judicial representa una nueva amenaza para la libertad de expresión y el ejercicio del periodismo en nuestro país.... se produce cuando una persona abusa de las demandas judiciales, para censurar un medio de comunicación y, por supuesto, a los periodistas responsables de la noticia,

Si queremos un periodismo libre e independiente, debemos buscar alternativas de emprendimiento.
La pasada semana se desarrolló en la ciudad de Panamá un taller sobre el hostigamiento judicial dirigido a periodistas, estudiantes de periodismo y directivos de los medios de comunicación social.
Para algunos entendidos, el hostigamiento judicial representa una nueva amenaza para la libertad de expresión y el ejercicio del periodismo en nuestro país.
Este nuevo concepto o particularidad podemos definirlo como un arquetipo de intimidación que se produce cuando una persona abusa de las demandas judiciales, para censurar un medio de comunicación y, por supuesto, a los periodistas responsables de la noticia, aunque en la mayoría de los casos están involucrados políticos, autoridades y gobernantes en supuestos casos de corrupción.
En este taller, periodistas y abogados nacionales y extranjeros, hablaron al auditorio, en su mayoría estudiantes de periodismo, sobre los problemas que enfrentan los periodistas y medios de comunicación en diversos países como: México y Colombia.
VEA TAMBIÉN: Discriminación y discapacidad
Obviamente, poniendo en perspectiva la situación actual en nuestro país.
Lamentablemente estos dos países lideran las estadísticas de periodistas asesinados.
La notable experiencia y los casos descritos de Felipe Sánchez (abogado colombiano) y Jan Albert Hootson (periodista holandés), sobre el particular, pone de manifiesto la realidad del ejercicio de nuestra profesión en Panamá y de lo cerca que estamos de pasar de la intimidación a la cárcel o la muerte.
Pero también nos abre la oportunidad de autoanalizarnos y encontrar como comunicadores sociales oportunidad para corregir los errores y blindar la libertad de expresión de sus detractores.
Asimismo se deja entendido que, si lo que queremos es un periodismo libre e independiente, lo que tenemos que hacer los periodistas es buscar alternativas de emprendimiento.
Tomando en cuenta que, al pasar el tiempo, está quedando más notoria la dudosa independencia que debe existir entre los medios de comunicación con el sector político y el poder económico en Panamá.
Como participante en el taller, tuve la oportunidad de expresar mis ideas y hacer algunas preguntas, entre ellas: ¿cómo puede un abogado defender a un "periodista" que supuestamente calumnió o injurió a otra persona en una noticia publicada en un medio de comunicación, si su defendido en realidad no es periodista?
Esta interrogante la formulé partiendo del hecho de que existen muchas personas que no son periodistas y que escriben o laboran en los medios de comunicación como tal.
Es decir, ¿a quién demandan, al periodista o a la persona (abogado, médico, ingeniero, etc.)?
Quizás los juristas pueden tener una explicación lógica basada en derecho sobre el tema.
Lo cierto es que, en estos momentos se está hablando de hostigamiento judicial a periodistas y a medios de comunicación.
VEA TAMBIÉN: FMI, hyperloop al infierno
No he escuchado a ningún dirigente gremial de periodismo, incluyéndome, o a los directivos de los medios de comunicación decir que la intimidación está direccionada a todas las profesiones.
En el conversatorio, nuevamente se hizo referencia sobre la necesidad de crear una ley que permita darle al periodista (graduado en una universidad) su idoneidad.
En reiteradas ocasiones he manifestado que es necesario definir quién es periodista y quien no lo es.
Y es que esto no se trata de atentar contra la libertad de expresión.
Se trata de darle el valor que esta profesión merece.
No hay nadie más capacitado para desarrollar un trabajo periodístico, que aquel que estudió para hacerlo.
De ahí, entre otras cosas, es que posiblemente nacen los errores del periodismo panameño.
Desaciertos que, quizás son cometidos por personas que no son periodistas.
Esta, entre otras causales, son las consecuencias de las críticas sociales al periodismo nacional.
En consecuencia, es necesario poner en una perspectiva clara de dónde nacen los hostigamientos judiciales hacia el periodismo y analizar, aunque ya está bastante claro, cuáles son las intenciones.
Pero lo más importante es conocer quién está detrás de todo esto y lo que podemos hacer para defendernos como periodistas.
Los medios de comunicación se defienden solos.
Callan cuando tienen que callar y hablan cuando es necesario.
Nuevamente se dice que "la objetividad no existe".
Por lo menos, Felipe Sánchez dijo que "no al cien por ciento".
Algo de eso debe existir.
Por eso es que los profesionales del periodismo debemos lidiar contra muchas amenazas.
¿Dónde están los enemigos de los periodistas?
¿Los tendremos al lado nuestro?
¿En quién podemos confiar?
Reflexionemos.
Solo Dios y nuestros principios éticos y morales nos ayudarán a ser mejores.
Periodista.
Para comentar debes registrarte y completar los datos generales.