Haití: el modelo de ayer, tragedia de hoy
Jovenel Moise resultó electo en elecciones controversiales en 2015. Al final de este histórico drama, Moise fue asesinado (igual que a Sam, en 1915) por fuerzas oscuras que bajo la penumbra haitiana se confabulan para hacer más difícil la salida de la crisis perenne. Hace más de 100 años el asesinato de un presidente provocó una nefasta invasión. Hoy no sabemos qué le depara el destino.
- Iván A. Ricord B.
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- - Publicado: 12/8/2021 - 12:00 am
El aumento de las peleas y la violencia entre bandas armadas en Puerto Príncipe, desde principios de junio de este año, provocó el desplazamiento de 17.105 civiles, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). Foto: EFE.
En enero de 1804, Jacques Dessalines, proclamó la independencia de la que había sido la más rica colonia francesa en el caribe. Sus libertadores decidieron que llevaría su nombre indígena: Ayiti (tierra de montañas.). Antes, en 1665 Francia reclamó formalmente a España la parte occidental de la Española, frecuentada por sus bucaneros. 30 años más tarde, España le cedió formalmente un tercio de La Española a Francia. En el otro costado quedó la Republica Dominicana.
La revolución haitiana de 1804 creó el segundo Estado independiente en las Américas y el primero de la América Latina y el Caribe. Se constituye la primera sociedad verdaderamente libre con una concepción radical sobre la libertad como un derecho humano fundamental. En efecto, Haití representó el cambio político más revolucionario del mundo en el momento. La Constitución de 1806 declaró a todas las personas iguales y libres, en una declaración que tendría profundas repercusiones políticas y sociales a lo largo del continente. Se constituyó un Estado sui generis.
La Declaración de la independencia de los Estados Unidos y más tarde, la de las colonias españolas no fueron más que una transferencia de control económico y social de la metrópoli a las nuevas clases propietarias. No hubo ninguna revolución social, ni democracia y ningún desafío a las élites. Los haitianos entregaron el poder político a todos en igualdad de sexo raza, color y riqueza. Se eliminaron los privilegios sociales y se abolió la esclavitud. En síntesis, se creó una República con todos los derechos para los negros.
Durante el Congreso de Panamá de 1826, la República de Haití fue vejada al no ser reconocida. La presión francesa y estadounidense y el racismo de los líderes latinoamericanos independentistas, incluyendo a Bolívar, deja fuera a Haití por ser negros y africanos. Desde entonces, Haití dejó de existir para América Latina.
La desventaja de Haití se agravó materialmente con la onerosa indemnización que debió pagar a Francia. Unos 150.000.000 francos (US$21.000 millones de euros de hoy), para compensar a los plantadores franceses por sus pérdidas durante la revolución. Los pagos equivalían a 10 veces a los ingresos anuales del gobierno haitiano, por lo tanto, debieron solicitar préstamos leoninos a Francia, Estados Unidos o Alemania. Les tomó 122 años pagar la deuda de la independencia.
Durante el siglo XX las cosas no cambiarían mucho. Entre 1915 y 1934, Haití fue ocupada por los Estados Unidos. En 1915, hubo una gran inestabilidad política. El último de los gobernantes (Sam) ordenó una masacre de presos políticos y luego él mismo fue asesinado y descuartizado. Wilson ordenó una invasión con el pretexto de proteger los intereses estadounidenses en Haití, pero evidenciando el temor de la presencia de Alemania en el Caribe. El pueblo rechazó la intervención que duró 19 años. Los invasores impusieron Presidentes títeres y los órganos democráticos fueron abolidos.
La violencia nunca se detuvo porque entre 1957 a 1986, Duvalier, padre e hijo sembraron el terror y desangraron el erario público. Se estima que durante el periodo desaparecieron a 60 mil personas de la oposición. En 1986, Duvalier huyó a Francia con los bolsillos llenos.
Luego de una sucesión de militares nefastos, los haitianos votaron por Aristide en 1990. Depuesto en 1991, volvió en 1994 con el apoyo de 20.000 soldados estadounidenses condicionado a aplicar medidas neoliberales exigidas por instituciones financieras protegidas por Washington.
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Seguidamente hubo una misión de la ONU para estabilizar los ánimos en el país La misión permaneció 15 años y dejó solo controversias y recelos.
En 2010, Haití sufrió un terremoto devastador que dejó miles de muertos y un millón de damnificados. El país siguió en ruinas.
Jovenel Moise resultó electo en elecciones controversiales en 2015. Al final de este histórico drama, Moise fue asesinado (igual que a Sam, en 1915) por fuerzas oscuras que bajo la penumbra haitiana se confabulan para hacer más difícil la salida de la crisis perenne. Hace más de 100 años el asesinato de un presidente provocó una nefasta invasión. Hoy no sabemos qué le depara el destino.
Profesor de la Universidad de Panamá. Universidad de Panamá.
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