Control de daños pensional
- José González Rivera
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- Cirujano Subespecialista
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En octubre de 2008, Islandia se declaró en bancarrota con la quiebra de la compañía norteamericana de servicios financieros Lehman Brothers. Los tres mayores bancos privados del país (el Glitnir, el Landsbanki y el Kaupthing) no pudieron pagar sus deudas y el valor combinado de sus activos era más de diez veces mayor que el PIB islandés, a raíz de lo cual pasaron a ser propiedad del Estado.
Como el país había adoptado la especulación y la financiarización de forma incondicional sumado a la gran crisis desencadenada a partir de las "hipotecas tóxicas", su enorme sector bancario se paralizó, casi arrasó con el mercado de valores nacional y provocó que el sistema de jubilación perdiera más del 20% de sus recursos.
Hasta antes de ese año Islandia contaba con un sistema de pensiones individuales y el fondo de pensiones era manejado por los bancos. De esta manera se socializaba el riesgo de la plata de las pensiones y se privatizaban los beneficios.
Actualmente estamos viviendo el miedo a una recesión en Estados Unidos y el fin del "yen gratis" que está golpeando las bolsas mundiales. En un sistema de pensiones de cuentas individuales manejado por fondos privados, como las que están planteando los actuarios chivia'os de la escuela de Chicago, el panameño debería asumir el riesgo de un mercado casi muerto. El saldo de su pensión se vería afectado tanto por la falta de cotizaciones durante el período de desempleo como por la crisis de mercado. A corto plazo, estos factores disminuyen el monto de las prestaciones que podría cobrar una persona próxima a jubilarse.
Un sistema de medidas paramétricas en este momento haría crecer la informalidad y el gobierno tendría que aumentar la cobertura y cantidad de 120 a los 65 (régimen no contributivo) en un futuro mediato de años.
Los islandeses se indignaron tanto por lo ocurrido con el dinero de sus pensiones que decidieron no regresar a sufrir por la especulación y por el manejo sin consecuencias de sus ahorros pensionales por lo cual adoptaron tres pilares: una pensión pública que se paga con impuestos (nuestro120 a los 65), una pensión con un pilar solidario que pagan los trabajadores y empleadores, y una pensión privada de ahorros voluntarios.
Según los estudios elaborado por el Índice Global de Pensiones Melbourne Mercer (IGPM), Islandia se alterna el primer (2021) o segundo (2023) puesto como mejor sistema de pensiones del mundo, según distintos indicadores.
Llevemos a un puerto seguro nuestro barco IVM: volvamos al pilar solidario y evaluemos cada 5 años, en el primer año de gobierno si hay necesidad de paramétricas o no. Panamá no tiene las tasas de nuevos contratos laborales que tenía antes de la pandemia, estamos pensando en trabajo formal más que cómo vamos a jubilarnos.
Empoderemos a nuestros trabajadores y empleadores, ya que los partidos políticos tradicionales (los de los auxilios) están pensando en costos políticos y rendir cuentas a los ciudadanos que en la protección de su vejez.
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