Celibato, ¿mandato de Dios?
Publicado 2005/02/26 00:00:00
Dios es consciente de las necesidades del hombre y la mujer.
Se abre la puerta del salón de clases, entra un hermano del colegio para hacer una inesperada pregunta: "¿Quiénes aquí están interesados en ser hermanos o padres?". Como era de esperar, ningún estudiante levantó la mano. Yo, que cursaba en ese aula, me sentí apenado por el hermano y le dije personalmente algo de lo cual me había acordado y que muchos desconocen por ignorancia: "Hermano, ¿usted sabe que el celibato no es un mandamiento de Dios, sino una sugerencia del apóstol San Pablo?"
- "Sí, yo lo sé", me respondió.
Para los lectores que desconocían esto, yo les aclararé detalladamente.
La Biblia en 1 Corintios, Cap. 7 ( I Co. 7) el apóstol Pablo predica algo interesante. El capítulo se titula "Problemas del Matrimonio" o en otra versión "Sobre el Matrimonio". Pablo acababa de tocar el tema de la fornicación en el capítulo anterior, para luego hablar sobre el matrimonio.
El apóstol afirma que lo ideal sería que el hombre no tocara mujer; pero, por causa y peligro de la fornicación, era recomendable que se casaran. Aquí vemos claramente que Dios es consciente de las necesidades del hombre y la mujer. Pablo continúa: "Mas esto lo digo por vía de concesión, no como mandamiento ( 1 Co. 7;6)" , es decir, lo expresa en función de consejo. Después dice: "Quisiera más bien que todos los hombres fuesen como yo, pero cada uno tiene su propio don ante Dios, a unos de una clase y a otros de otra (1 Co. 7;7)" . Y, en el versículo 9 del mismo capítulo (y es aquí donde Pablo hace énfasis), escribe: "Pero si no tienen don de continencia, cásense, pues es mejor casarse que estarse quemando" .
Hoy en día se han visto casos de padres que mantienen relaciones íntimas con monjas u otras mujeres, casos como los presentados en la película "El crimen del Padre Amaro". Mi pregunta es, si existen personas que carecen del don de abstinencia, pero quieren disponer de una vida servicial de predicación del Señor, ¿por qué entonces la Iglesia católica los obligan a prescindir de sus vidas sexuales? ¿Acaso Pablo no dio oportunidad a personas incapaces de cumplir el celibato? (Los casos de pedofilia son injustificados e inexcusables, por lo tanto obviaré el tema).
La sociedad de hoy ha tendido a presentar una imagen provocativa de la sexualidad, por no decir pervertida, y es común que ningún estudiante haya levantado la mano para ser cura, puesto que se mira en un complicado futuro, en el cual tendrá que abstenerse sexualmente por el resto de su vida; obviamente, por esa imagen social de la sexualidad, carecen del don de la contención. Por esta razón, prefiere alejarse de la vida del celibato y, lamentablemente, de seguir al Señor de una manera más marcada.
No estoy diciendo ni proclamando que un laico no pueda servir al Señor, pero siento que algunas iglesias son las responsables de la repugnancia que sienten varios jóvenes hacia la religión, porque han hecho ley lo que no era ley, y que no era ley por misericordia y comprensión de Dios. Pero admiro a algunas religiones que sí han tomado para ellos esa parte, como los evangélicos, mormones, adventistas, etc, cuyos pastores u obispos disponen de una familia, y eso no significa que estén pecando.
Para finalizar, les resumo que Pablo termina el capítulo explicando por qué para él era mejor y conveniente el no casarse, ya que alguien soltero puede dedicar su vida por completo a Dios; sin embargo, alguien casado tendría que dividirla para su cónyuge y para Dios. Pero, reitero, todo esto como sugerencia, no como mandamiento.
"Así que si se casa con su prometida, hace bien; pero si no se casa, hace mejor". (1Co. 7; 38)
(kevinarjona@email.com)
- "Sí, yo lo sé", me respondió.
Para los lectores que desconocían esto, yo les aclararé detalladamente.
La Biblia en 1 Corintios, Cap. 7 ( I Co. 7) el apóstol Pablo predica algo interesante. El capítulo se titula "Problemas del Matrimonio" o en otra versión "Sobre el Matrimonio". Pablo acababa de tocar el tema de la fornicación en el capítulo anterior, para luego hablar sobre el matrimonio.
El apóstol afirma que lo ideal sería que el hombre no tocara mujer; pero, por causa y peligro de la fornicación, era recomendable que se casaran. Aquí vemos claramente que Dios es consciente de las necesidades del hombre y la mujer. Pablo continúa: "Mas esto lo digo por vía de concesión, no como mandamiento ( 1 Co. 7;6)" , es decir, lo expresa en función de consejo. Después dice: "Quisiera más bien que todos los hombres fuesen como yo, pero cada uno tiene su propio don ante Dios, a unos de una clase y a otros de otra (1 Co. 7;7)" . Y, en el versículo 9 del mismo capítulo (y es aquí donde Pablo hace énfasis), escribe: "Pero si no tienen don de continencia, cásense, pues es mejor casarse que estarse quemando" .
Hoy en día se han visto casos de padres que mantienen relaciones íntimas con monjas u otras mujeres, casos como los presentados en la película "El crimen del Padre Amaro". Mi pregunta es, si existen personas que carecen del don de abstinencia, pero quieren disponer de una vida servicial de predicación del Señor, ¿por qué entonces la Iglesia católica los obligan a prescindir de sus vidas sexuales? ¿Acaso Pablo no dio oportunidad a personas incapaces de cumplir el celibato? (Los casos de pedofilia son injustificados e inexcusables, por lo tanto obviaré el tema).
La sociedad de hoy ha tendido a presentar una imagen provocativa de la sexualidad, por no decir pervertida, y es común que ningún estudiante haya levantado la mano para ser cura, puesto que se mira en un complicado futuro, en el cual tendrá que abstenerse sexualmente por el resto de su vida; obviamente, por esa imagen social de la sexualidad, carecen del don de la contención. Por esta razón, prefiere alejarse de la vida del celibato y, lamentablemente, de seguir al Señor de una manera más marcada.
No estoy diciendo ni proclamando que un laico no pueda servir al Señor, pero siento que algunas iglesias son las responsables de la repugnancia que sienten varios jóvenes hacia la religión, porque han hecho ley lo que no era ley, y que no era ley por misericordia y comprensión de Dios. Pero admiro a algunas religiones que sí han tomado para ellos esa parte, como los evangélicos, mormones, adventistas, etc, cuyos pastores u obispos disponen de una familia, y eso no significa que estén pecando.
Para finalizar, les resumo que Pablo termina el capítulo explicando por qué para él era mejor y conveniente el no casarse, ya que alguien soltero puede dedicar su vida por completo a Dios; sin embargo, alguien casado tendría que dividirla para su cónyuge y para Dios. Pero, reitero, todo esto como sugerencia, no como mandamiento.
"Así que si se casa con su prometida, hace bien; pero si no se casa, hace mejor". (1Co. 7; 38)
(kevinarjona@email.com)

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