¿Una neutralidad condicionada?
Publicado 1999/05/23 23:00:00
- Giovanna OrtÃz / Contacto
PRIMERA ENTREGA
El controversial Tratado de Neutralidad no deja de inquietar, y eso quedó demostrado en un reciente encuentro pre electoral, donde tres exponentes del igual número de propuestas de gobierno, cruzaron impresiones sobre el pacto canalero. Hoy, como se sabe, la propuesta de Mireya Moscoso ha quedado en el tapete, en vías de ejecución.
Los tres expositores ensayaron sus interpretaciones, sobre los alcances de un Tratado que con la culminación del otro, será el único que regirá desde el 2000, las relaciones de EU con Panamá, y que para muchos permite la intervención militar de EU en Panamá, mientras que para algunos de sus defensores, de ninguna manera permite tal eventualidad.
Antes de conocer lo que el nuevo gobierno considera hacer con el pacto, conviene evocar la matriz en que se concertó, bajo el torbellino de una dictadura, para proyectar las expectativas que generaría el "Tratado Concerniente a la Neutralidad Permanente y al Funcionamiento del Canal de Panamá", más conocido como el Tratado de Neutralidad.
Este pacto fue firmado por Omar Torrijos, con dos "Condiciones": La Condición número uno o "Reserva DeConcini" que habla del "uso de la fuerza militar" de EU en Panamá, y la Condición dos, o "Reserva Nunn", que habla de "acuerdos" para establecer "fuerzas militares" de EU en Panamá después del año 2000. ¿Se pactó una neutralidad condicionada?
LOS TRATADOS DE 1977
El 7 de septiembre de 1977 fueron firmados en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA), sita en Washington, los Tratados Torrijos Carter. Uno de esos pactos es el "Tratado del Canal de Panamá", que culmina el 31 de diciembre de 1999, y el otro es el llamado "Tratado de Neutralidad", sin fecha de expiración.
Los Tratados fueron llevados a un plebiscito celebrado el 23 de octubre de 1977, precedido de un ambiente huérfano de suficientes opiniones adversas a lo que se negociaba, donde no se había reconocido la existencia de partidos políticos, y donde los derechos a la libertad de expresión y de reunión estaban suspendidos.
Aunque el resultado resultó favorable a la aprobación de los Tratados, no pocas suspicacias despertó el hecho de que acudiera a las votaciones el 97.33 % de la población electoral, y el que, de acuerdo a las cifras del oficialismo, la cantidad de personas con capacidad de votar en 1979, era menor en miles, de la que votó en el plebiscito.
Al hacer uso de la palabra, con motivo de la firma de los Tratados el 7 de septiembre en Washington, el general Torrijos exclamó una frase que ha sido considerada por sus detractores como la confesión de haber pactado con Estados Unidos la autorización para que esa potencia intervenga militarmente en Panamá.
"...y porque estamos pactando un tratado de neutralidad que nos coloca bajo el paraguas defensivo del Pentágono, pacto éste que de no ser administrado por las futuras generaciones, puede convertirse en instrumento de permanente intervención", dijo el general Omar Torrijos, en su breve intervención.
El Senado de EU dio su consentimiento para que el presidente Jimmy Carter ratificara el Tratado de Neutralidad el 16 de marzo de 1978, pero con enmiendas, condiciones, reservas y entendimientos, que debían ser incluidos en el instrumento de ratificación que se canjearía. Igual ocurrió con el Tratado del Canal de Panamá, cuando el 18 de abril de 1978, el Senado hizo otro tanto pero con reservas y entendimientos.
Entre esos cambios al Tratado de Neutralidad, incluidos en el Senado, están la Condición 1 ó "Reserva DeConcini", introducida por el senador Dennis DeConcini donde se habla del "uso de la fuerza militar" de EU en Panamá, y la Condición 2, o "Reserva Nunn", propuesta por el senador Sam Nunn, donde se deja abierta la puerta para concertar "acuerdos" para establecer fuerzas militares de EU en Panamá.
"FRASE INFELIZ"
De acuerdo al ex negociador de los Tratados Torrijos Carter, Carlos López Guevara, cuando Torrijos habló del "Paraguas defensivo del Pentágono", no hacía otra cosa que pronunciar una "frase infeliz" e "inoportuna".
Sin embargo, agrega López Guevara, él utilizó "bajo el paraguas defensivo del Pentágono, lo que significa que "para el evento de que alguien nos ataque, allí está el paraguas defensivo del Pentágono. Quien ose atacar al Canal o interferir con su neutralidad debe temer al paraguas defensivo del Pentágono", dijo López Guevara.
Cuando se le preguntó al entrevistado si su afirmación es válida "aunque fuera Panamá el que hiciera algo que EU considere una amenaza", el ex negociador de los Tratados, respondió que "no porque si estamos hablando de defensivo", lo cual "quiere decir que Panamá es el que pide ese auxilio, porque es defensivo".
Inquirido sobre cuál era la razón por la que consideraba que la frase de Torrijos era "infeliz", el entrevistado respondió que la misma "se ha prestado, en el sector panameño sobre todo, para indicar que allí el Pentágono puede venir a discreción", cosa que resulta diferente a lo que Torrijos pensaba.
"Lo que Torrijos estaba pensando es que si hubiera una necesidad el presidente de Panamá coge el teléfono, habla con el presidente de Estados Unidos y dice vengan a defendernos. Entonces Estados Unidos actuaría inmediatamente, cosa que no es correcta porque ambos países deben someterse a sus sistemas constitucionales", alegó.
FUERZA Y BASE MILITAR
Textualmente la Reserva DeConini dice: "No obstante las estipulaciones del artículo V o cualquier otra estipulación del Tratado, si el Canal fuere cerrado o se interfiriera con su funcionamiento, la República de Panamá y los Estados Unidos de América, cada uno tendrá, independientemente, el derecho de tomar las medidas que cada uno considere necesarias, de conformidad con sus procedimientos constitucionales, incluyendo el uso de la fuerza militar en la República de Panamá, para reabrir el Canal o reanudar las operaciones del Canal según fuere el caso".
En tanto, la "Reserva Nunn" dispone: "Nada en este Tratado impedirá a la República de Panamá ni a los Estados Unidos de América, de acuerdo con sus respectivos procedimientos constitucionales, concertar cualquier acuerdo o arreglo entre los dos países para facilitar, en cualquier momento posterior al 31 de diciembre de 1999, el cumplimiento de sus responsabilidades para mantener el régimen de neutralidad establecido en el Tratado, incluyendo acuerdos o arreglos para el estacionamiento de cualesquiera fuerzas militares estadounidenses o el mantenimiento en la República de Panamá de sitios de defensa con posterioridad a dicha fecha, que la República de Panamá y los Estados Unidos de América puedan considerar necesarios o apropiados".
Ambas polémicas disposiciones fueron incluidas en el "Instrumento de Ratificación de la República de Panamá del Tratado Concerniente a la Neutralidad Permanente del Canal y al Funcionamiento del Canal de Panamá", firmado por Omar Torrijos Herrera, el dieciséis de junio de 1978, según consta en los documentos que reposan en la sede de la OEA.
¿REVISAR PARCIALMENTE?
A López Guevara se le inquirió si es necesario, a su juicio, revisar el Tratado de Neutralidad o, por el contrario, considera que tal como está es aceptable, y a ello respondió que "fundamentalmente sí" hay que revisarlo, pero agregó que "si la gente está pensando que es para eliminar la enmienda DeConcini no se necesita".
"Lo que nosotros debemos hacer es restablecer el balance, el equilibrio, de manera que no haya privilegios para Estados Unidos, ni para ninguna nación", dijo el ex negociador, antes de precisar que "nosotros podemos hacer una negociación para eliminar eso que le quita el balance al Tratado de Neutralidad".
Preguntado a qué se refería cuando hablaba de aquello que resta "balance", López Guevara dijo que el régimen de Neutralidad de Tratado de 1977, contiene cláusulas que no son de balance, y ello obra a favor de Estados Unidos. Tal es el caso, por ejemplo, el colocarse al frente de la fila, o el paso expedito.
ENMIENDA NUNN
Cuando se le preguntó a López Guevara, si la Enmienda Nunn podía ser compatible con la neutralidad del Canal, invitó a los panameños a que leyeran dos instrumentos que contienen la "interpretación de Panamá" sobre estas enmiendas. Se trata de un comunicado que expidió el Ministerio de Relaciones Exteriores en 1978.
De acuerdo a López Guevara, el comunicado del 25 de abril de 1978, fue de su autoría, por lo que habla con "toda propiedad". Dice saber "para qué se hizo", es decir, "se hizo para borrar todo vestigio de que el Tratado de Neutralidad restableció la intervención, sobre lo que hay que tener muy claro: La intervención nunca será un derecho, sino un delito".
"La Enmienda Nunn señala la posibilidad de que Panamá y Estados Unidos negocien la prórroga de las bases militares en Panamá, lo cual tiene el significado de que los países que han adherido al Protocolo del Tratado de Neutralidad aceptan por adelantado que Panamá y Estados Unidos negocien bases militares", sostuvo.
El ex negociador dijo en tal sentido, que ello significa que quienes se adhirieron al Protocolo de Neutralidad "están aceptando la enmienda Nunn, es decir, que Panamá negocie bases militares, que las bases militares en suelo panameño después del año 2000, no contradicen el Tratado de Neutralidad".
DECONCINI
La enmienda DeConcini, donde se establece el uso de la fuerza militar de EU en Panamá, está escrita y firmada por Omar Torrijos en el Instrumento de Ratificación, pero se alega que ella no existe. "La enmienda DeConcini no existe, y eso lo sostuve yo y lo sigo sosteniendo", es lo que expresó Carlos López Guevara.
En el mismo comunicado que expidió el Ministerio de Relaciones Exteriores, arriba mencionado por el ex negociador Carlos López Guevara, se aborda la Enmienda De Concini, argumentando que ésta "fue neutralizada por la enmienda de liderazgo o enmienda Church", contenida en el Tratado del Canal de Panamá.
López Guevara habló del libro "Panamá Odyssey" del ex embajador de EU, William Jorden. "Yo voy a citar en inglés lo que hicieron el Senado, el presidente Carter, el subsecretario de Estado, Cristopher Warren, el embajador Jorden y el equipo panameño, para explicar por qué la enmienda Church es la rebelión de un grupo de senadores liberales contra la enmienda DeConcini", expresó.
"¿Para qué se hizo la enmienda Church?, se preguntó López Guevara, antes de contestarse citando el libro de Jorden: Para disowning (desvincularse, pag. 563), para undo (deshacer, pag. 567) to neutralize (neutralizar, pag. 571) to balance (balancear, pag. 571), como content move (contra medida, pag. 583), etc.
"Estos son los argumentos que un patriota panameño tiene que utilizar para decir que lo que el Senado hizo al aprobar la enmienda Church, fue eliminar los efectos intervencionistas de la enmienda DeConcini, porque de ésta manera, la misma quedó "neutralizada", aseguró el abogado.
Preguntado si el que la enmienda Church forme parte del Tratado del Canal de Panamá, que culmine en diciembre próximo, sea razón para que ella no tenga efecto sobre el Tratado de Neutralidad que no culmina en esa fecha, y que no tiene fecha de terminación, López Guevara respondió que "no importa porque es parte de esa negociación".
PACTO "INTERVENCINISTA"
Para el jurista Diógenes Arosemena el Tratado de Neutralidad "es a perpetuidad" y es "intervencionista".
"En ese Tratado EU garantiza la neutralización del Canal y de la República a un precio muy alto", explicó antes de precisar que "ellos convierten esa obligación de garantizar la neutralidad un derecho para intervenir en la República, cuando consideren amenazado el Canal". Esto puede darse incluso por "algaradas internas", hace notar.
Preguntado sobre la frase con la que Torrijos decía que nos colocaba bajo el "Paraguas defensivo del Pentágono", cuando firmaba el Tratado, el abogado respondió que se trataba de una frase "muy certera" y llena de adornos, que al final de cuentas viene a decir que "el Tratado ese, en cualquier momento, permite que los gringos estén dentro del país".
Arosemena se manifiesta disiente de la neutralización que preconiza este Tratado de Neutralidad, por una cuestión de carácter técnico. "Los tratados multilaterales son los únicos que llevan una cláusula de adhesión", pero "este Tratado bilateral entre Panamá y los Estados Unidos, contiene una cláusula de adhesión", explica el jurista.
De allí, sigue diciendo el letrado, que los demás Estados que así lo quieran, se puedan adherir al Tratado. Sin embargo -anota- "la neutralización sigue siendo garantizada por los Estados Unidos y yo no estoy de acuerdo con eso", subraya el autor de la obra "Historia Documental del Canal de Panamá", publicada en tres volúmenes.
Para el abogado resulta dolorosa la existencia del Tratado de Neutralidad, porque es un tratado a perpetuidad "que acepta la intervención norteamericana", punto de vista que también han sostenido otros abogados, y que en el caso de la intervención en los asuntos internos de Panamá, fue mencionado por el entonces canciller Julio Linares (q.e.p.d.).
DEBE SER DEROGADO
Diógenes Arosemena evocó que las enmiendas de DeConcini y la de Nunn, -esto se decía en el gobierno dictatorial que produjo estos tratados- era un acuerdo al que se había llegado con Torrijos. "Torrijos venía de Oriente, llegó a Nueva York, Carter le dijo que fuera a la Casa Blanca, y ahí se produjo eso".
De acuerdo al jurista, Carter dijo a Torrijos que si no se daba esa declaración presidencial de ambos, "el Tratado corría el peligro de no ser aprobado". Según Julio Linares, la razón del encuentro era lo "indispensable" de aclarar disposiciones del Tratado de Neutralidad, pues de lo contrario peligraba el consentimiento del Senado para su ratificación.
A Diógenes Arosemena se le preguntó si cree compatible el que se pueda arreglar o acordar el establecimiento de bases militares después del 2000, con la neutralidad en Panamá, respondió que "toda la lucha" de la población panameña ha sido "en contra de la ocupación norteamericana".
Para Arosemena, el Estado soberano solamente existe si se dan cuatro condiciones: el terreno, territorio, la población el gobierno y la soberanía, pero cuando se vulnera o se destruye una de esas exigencias, "no hay soberanía", por lo que "bases militares significarían concesiones del Estado panameño".
"Yo digo que no van a haber esas concesiones", aseguró Arosemena, que en declaraciones anteriores opinó sobre el desacuerdo de la entonces candidata Moscoso con el pacto de Neutralidad. La señora Moscoso "tendrá que asesorarse. Y los mejores panameños tendrán que exigir que ese Tratado sea derogado", dijo Arosemena en aquella oportunidad.
El controversial Tratado de Neutralidad no deja de inquietar, y eso quedó demostrado en un reciente encuentro pre electoral, donde tres exponentes del igual número de propuestas de gobierno, cruzaron impresiones sobre el pacto canalero. Hoy, como se sabe, la propuesta de Mireya Moscoso ha quedado en el tapete, en vías de ejecución.
Los tres expositores ensayaron sus interpretaciones, sobre los alcances de un Tratado que con la culminación del otro, será el único que regirá desde el 2000, las relaciones de EU con Panamá, y que para muchos permite la intervención militar de EU en Panamá, mientras que para algunos de sus defensores, de ninguna manera permite tal eventualidad.
Antes de conocer lo que el nuevo gobierno considera hacer con el pacto, conviene evocar la matriz en que se concertó, bajo el torbellino de una dictadura, para proyectar las expectativas que generaría el "Tratado Concerniente a la Neutralidad Permanente y al Funcionamiento del Canal de Panamá", más conocido como el Tratado de Neutralidad.
Este pacto fue firmado por Omar Torrijos, con dos "Condiciones": La Condición número uno o "Reserva DeConcini" que habla del "uso de la fuerza militar" de EU en Panamá, y la Condición dos, o "Reserva Nunn", que habla de "acuerdos" para establecer "fuerzas militares" de EU en Panamá después del año 2000. ¿Se pactó una neutralidad condicionada?
LOS TRATADOS DE 1977
El 7 de septiembre de 1977 fueron firmados en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA), sita en Washington, los Tratados Torrijos Carter. Uno de esos pactos es el "Tratado del Canal de Panamá", que culmina el 31 de diciembre de 1999, y el otro es el llamado "Tratado de Neutralidad", sin fecha de expiración.
Los Tratados fueron llevados a un plebiscito celebrado el 23 de octubre de 1977, precedido de un ambiente huérfano de suficientes opiniones adversas a lo que se negociaba, donde no se había reconocido la existencia de partidos políticos, y donde los derechos a la libertad de expresión y de reunión estaban suspendidos.
Aunque el resultado resultó favorable a la aprobación de los Tratados, no pocas suspicacias despertó el hecho de que acudiera a las votaciones el 97.33 % de la población electoral, y el que, de acuerdo a las cifras del oficialismo, la cantidad de personas con capacidad de votar en 1979, era menor en miles, de la que votó en el plebiscito.
Al hacer uso de la palabra, con motivo de la firma de los Tratados el 7 de septiembre en Washington, el general Torrijos exclamó una frase que ha sido considerada por sus detractores como la confesión de haber pactado con Estados Unidos la autorización para que esa potencia intervenga militarmente en Panamá.
"...y porque estamos pactando un tratado de neutralidad que nos coloca bajo el paraguas defensivo del Pentágono, pacto éste que de no ser administrado por las futuras generaciones, puede convertirse en instrumento de permanente intervención", dijo el general Omar Torrijos, en su breve intervención.
El Senado de EU dio su consentimiento para que el presidente Jimmy Carter ratificara el Tratado de Neutralidad el 16 de marzo de 1978, pero con enmiendas, condiciones, reservas y entendimientos, que debían ser incluidos en el instrumento de ratificación que se canjearía. Igual ocurrió con el Tratado del Canal de Panamá, cuando el 18 de abril de 1978, el Senado hizo otro tanto pero con reservas y entendimientos.
Entre esos cambios al Tratado de Neutralidad, incluidos en el Senado, están la Condición 1 ó "Reserva DeConcini", introducida por el senador Dennis DeConcini donde se habla del "uso de la fuerza militar" de EU en Panamá, y la Condición 2, o "Reserva Nunn", propuesta por el senador Sam Nunn, donde se deja abierta la puerta para concertar "acuerdos" para establecer fuerzas militares de EU en Panamá.
"FRASE INFELIZ"
De acuerdo al ex negociador de los Tratados Torrijos Carter, Carlos López Guevara, cuando Torrijos habló del "Paraguas defensivo del Pentágono", no hacía otra cosa que pronunciar una "frase infeliz" e "inoportuna".
Sin embargo, agrega López Guevara, él utilizó "bajo el paraguas defensivo del Pentágono, lo que significa que "para el evento de que alguien nos ataque, allí está el paraguas defensivo del Pentágono. Quien ose atacar al Canal o interferir con su neutralidad debe temer al paraguas defensivo del Pentágono", dijo López Guevara.
Cuando se le preguntó al entrevistado si su afirmación es válida "aunque fuera Panamá el que hiciera algo que EU considere una amenaza", el ex negociador de los Tratados, respondió que "no porque si estamos hablando de defensivo", lo cual "quiere decir que Panamá es el que pide ese auxilio, porque es defensivo".
Inquirido sobre cuál era la razón por la que consideraba que la frase de Torrijos era "infeliz", el entrevistado respondió que la misma "se ha prestado, en el sector panameño sobre todo, para indicar que allí el Pentágono puede venir a discreción", cosa que resulta diferente a lo que Torrijos pensaba.
"Lo que Torrijos estaba pensando es que si hubiera una necesidad el presidente de Panamá coge el teléfono, habla con el presidente de Estados Unidos y dice vengan a defendernos. Entonces Estados Unidos actuaría inmediatamente, cosa que no es correcta porque ambos países deben someterse a sus sistemas constitucionales", alegó.
FUERZA Y BASE MILITAR
Textualmente la Reserva DeConini dice: "No obstante las estipulaciones del artículo V o cualquier otra estipulación del Tratado, si el Canal fuere cerrado o se interfiriera con su funcionamiento, la República de Panamá y los Estados Unidos de América, cada uno tendrá, independientemente, el derecho de tomar las medidas que cada uno considere necesarias, de conformidad con sus procedimientos constitucionales, incluyendo el uso de la fuerza militar en la República de Panamá, para reabrir el Canal o reanudar las operaciones del Canal según fuere el caso".
En tanto, la "Reserva Nunn" dispone: "Nada en este Tratado impedirá a la República de Panamá ni a los Estados Unidos de América, de acuerdo con sus respectivos procedimientos constitucionales, concertar cualquier acuerdo o arreglo entre los dos países para facilitar, en cualquier momento posterior al 31 de diciembre de 1999, el cumplimiento de sus responsabilidades para mantener el régimen de neutralidad establecido en el Tratado, incluyendo acuerdos o arreglos para el estacionamiento de cualesquiera fuerzas militares estadounidenses o el mantenimiento en la República de Panamá de sitios de defensa con posterioridad a dicha fecha, que la República de Panamá y los Estados Unidos de América puedan considerar necesarios o apropiados".
Ambas polémicas disposiciones fueron incluidas en el "Instrumento de Ratificación de la República de Panamá del Tratado Concerniente a la Neutralidad Permanente del Canal y al Funcionamiento del Canal de Panamá", firmado por Omar Torrijos Herrera, el dieciséis de junio de 1978, según consta en los documentos que reposan en la sede de la OEA.
¿REVISAR PARCIALMENTE?
A López Guevara se le inquirió si es necesario, a su juicio, revisar el Tratado de Neutralidad o, por el contrario, considera que tal como está es aceptable, y a ello respondió que "fundamentalmente sí" hay que revisarlo, pero agregó que "si la gente está pensando que es para eliminar la enmienda DeConcini no se necesita".
"Lo que nosotros debemos hacer es restablecer el balance, el equilibrio, de manera que no haya privilegios para Estados Unidos, ni para ninguna nación", dijo el ex negociador, antes de precisar que "nosotros podemos hacer una negociación para eliminar eso que le quita el balance al Tratado de Neutralidad".
Preguntado a qué se refería cuando hablaba de aquello que resta "balance", López Guevara dijo que el régimen de Neutralidad de Tratado de 1977, contiene cláusulas que no son de balance, y ello obra a favor de Estados Unidos. Tal es el caso, por ejemplo, el colocarse al frente de la fila, o el paso expedito.
ENMIENDA NUNN
Cuando se le preguntó a López Guevara, si la Enmienda Nunn podía ser compatible con la neutralidad del Canal, invitó a los panameños a que leyeran dos instrumentos que contienen la "interpretación de Panamá" sobre estas enmiendas. Se trata de un comunicado que expidió el Ministerio de Relaciones Exteriores en 1978.
De acuerdo a López Guevara, el comunicado del 25 de abril de 1978, fue de su autoría, por lo que habla con "toda propiedad". Dice saber "para qué se hizo", es decir, "se hizo para borrar todo vestigio de que el Tratado de Neutralidad restableció la intervención, sobre lo que hay que tener muy claro: La intervención nunca será un derecho, sino un delito".
"La Enmienda Nunn señala la posibilidad de que Panamá y Estados Unidos negocien la prórroga de las bases militares en Panamá, lo cual tiene el significado de que los países que han adherido al Protocolo del Tratado de Neutralidad aceptan por adelantado que Panamá y Estados Unidos negocien bases militares", sostuvo.
El ex negociador dijo en tal sentido, que ello significa que quienes se adhirieron al Protocolo de Neutralidad "están aceptando la enmienda Nunn, es decir, que Panamá negocie bases militares, que las bases militares en suelo panameño después del año 2000, no contradicen el Tratado de Neutralidad".
DECONCINI
La enmienda DeConcini, donde se establece el uso de la fuerza militar de EU en Panamá, está escrita y firmada por Omar Torrijos en el Instrumento de Ratificación, pero se alega que ella no existe. "La enmienda DeConcini no existe, y eso lo sostuve yo y lo sigo sosteniendo", es lo que expresó Carlos López Guevara.
En el mismo comunicado que expidió el Ministerio de Relaciones Exteriores, arriba mencionado por el ex negociador Carlos López Guevara, se aborda la Enmienda De Concini, argumentando que ésta "fue neutralizada por la enmienda de liderazgo o enmienda Church", contenida en el Tratado del Canal de Panamá.
López Guevara habló del libro "Panamá Odyssey" del ex embajador de EU, William Jorden. "Yo voy a citar en inglés lo que hicieron el Senado, el presidente Carter, el subsecretario de Estado, Cristopher Warren, el embajador Jorden y el equipo panameño, para explicar por qué la enmienda Church es la rebelión de un grupo de senadores liberales contra la enmienda DeConcini", expresó.
"¿Para qué se hizo la enmienda Church?, se preguntó López Guevara, antes de contestarse citando el libro de Jorden: Para disowning (desvincularse, pag. 563), para undo (deshacer, pag. 567) to neutralize (neutralizar, pag. 571) to balance (balancear, pag. 571), como content move (contra medida, pag. 583), etc.
"Estos son los argumentos que un patriota panameño tiene que utilizar para decir que lo que el Senado hizo al aprobar la enmienda Church, fue eliminar los efectos intervencionistas de la enmienda DeConcini, porque de ésta manera, la misma quedó "neutralizada", aseguró el abogado.
Preguntado si el que la enmienda Church forme parte del Tratado del Canal de Panamá, que culmine en diciembre próximo, sea razón para que ella no tenga efecto sobre el Tratado de Neutralidad que no culmina en esa fecha, y que no tiene fecha de terminación, López Guevara respondió que "no importa porque es parte de esa negociación".
PACTO "INTERVENCINISTA"
Para el jurista Diógenes Arosemena el Tratado de Neutralidad "es a perpetuidad" y es "intervencionista".
"En ese Tratado EU garantiza la neutralización del Canal y de la República a un precio muy alto", explicó antes de precisar que "ellos convierten esa obligación de garantizar la neutralidad un derecho para intervenir en la República, cuando consideren amenazado el Canal". Esto puede darse incluso por "algaradas internas", hace notar.
Preguntado sobre la frase con la que Torrijos decía que nos colocaba bajo el "Paraguas defensivo del Pentágono", cuando firmaba el Tratado, el abogado respondió que se trataba de una frase "muy certera" y llena de adornos, que al final de cuentas viene a decir que "el Tratado ese, en cualquier momento, permite que los gringos estén dentro del país".
Arosemena se manifiesta disiente de la neutralización que preconiza este Tratado de Neutralidad, por una cuestión de carácter técnico. "Los tratados multilaterales son los únicos que llevan una cláusula de adhesión", pero "este Tratado bilateral entre Panamá y los Estados Unidos, contiene una cláusula de adhesión", explica el jurista.
De allí, sigue diciendo el letrado, que los demás Estados que así lo quieran, se puedan adherir al Tratado. Sin embargo -anota- "la neutralización sigue siendo garantizada por los Estados Unidos y yo no estoy de acuerdo con eso", subraya el autor de la obra "Historia Documental del Canal de Panamá", publicada en tres volúmenes.
Para el abogado resulta dolorosa la existencia del Tratado de Neutralidad, porque es un tratado a perpetuidad "que acepta la intervención norteamericana", punto de vista que también han sostenido otros abogados, y que en el caso de la intervención en los asuntos internos de Panamá, fue mencionado por el entonces canciller Julio Linares (q.e.p.d.).
DEBE SER DEROGADO
Diógenes Arosemena evocó que las enmiendas de DeConcini y la de Nunn, -esto se decía en el gobierno dictatorial que produjo estos tratados- era un acuerdo al que se había llegado con Torrijos. "Torrijos venía de Oriente, llegó a Nueva York, Carter le dijo que fuera a la Casa Blanca, y ahí se produjo eso".
De acuerdo al jurista, Carter dijo a Torrijos que si no se daba esa declaración presidencial de ambos, "el Tratado corría el peligro de no ser aprobado". Según Julio Linares, la razón del encuentro era lo "indispensable" de aclarar disposiciones del Tratado de Neutralidad, pues de lo contrario peligraba el consentimiento del Senado para su ratificación.
A Diógenes Arosemena se le preguntó si cree compatible el que se pueda arreglar o acordar el establecimiento de bases militares después del 2000, con la neutralidad en Panamá, respondió que "toda la lucha" de la población panameña ha sido "en contra de la ocupación norteamericana".
Para Arosemena, el Estado soberano solamente existe si se dan cuatro condiciones: el terreno, territorio, la población el gobierno y la soberanía, pero cuando se vulnera o se destruye una de esas exigencias, "no hay soberanía", por lo que "bases militares significarían concesiones del Estado panameño".
"Yo digo que no van a haber esas concesiones", aseguró Arosemena, que en declaraciones anteriores opinó sobre el desacuerdo de la entonces candidata Moscoso con el pacto de Neutralidad. La señora Moscoso "tendrá que asesorarse. Y los mejores panameños tendrán que exigir que ese Tratado sea derogado", dijo Arosemena en aquella oportunidad.
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