En Panamá se apuesta por la fortificación de los alimentos
- Tomado de Internet
Existe un plan nacional que tiene como fin agregar micronutrientes como vitamina A, hierro y zinc a los alimentos de consumo masivo como el arroz.
Una investigación adelantada por el Ministerio de Salud (MINSA) determinó que el 6.8% de la población de cinco años padece de desnutrición, mientras que el 22.1% está en riesgo de sufrirla, por ello se dispuso la aplicación de un plan nacional que tiene como fin agregar micronutrientes a los alimentos de consumo masivo, como el arroz.
Luego de que la encuesta de niveles de vida 2006 indicara que el 64% de la población infantil del área urbana presenta problemas de desnutrición y el 32% de los niños residentes en el área rural se encuentran en la misma situación, se decidió establecer un plan de enriquecimiento de alimentos con micronutrientes.
Dentro del estudio, se destacó el hecho que en el gasto per cápita por alimentos en el área rural indígena se destinó el 13.2% del gasto a la compra de arroz.
Mientras que en el área urbana las familias destinaron el 42% del gasto en alimentos a la compra de productos de origen animal.
Se encontraron deficiencias de vitamina A, hierro y zinc, cuya ausencia puede causar problemas de retraso mental.
Los niveles de desnutrición y falta de acceso a una buena alimentación también se traducen en altos costos para el Estado panameño, que según estudio realizado por la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) alcanzó la cifra de B/ 322 millones en el año 2004.
La investigación hecha por la CEPAL indica que esta cifra es cerca del 2.3% del Producto Interno Bruto (PIB) del país para esa fecha y que es necesario adoptar estrategia para disminuir los efectos de la desnutrición, especialmente en la población infantil.
La mayor parte de estos costos se producen por la pérdida de productividad que ha generado la desnutrición a la que han estado expuestos durante su infancia quienes hoy forman parte de la población en edad de trabajar.
Paralelamente, un estudio realizado por la Fundación Nutre Hogar señala que la disponibilidad de alimentos a la población panameña ha disminuido en los últimos años, debido al incremento en el costo de los alimentos, bajos salarios y alto porcentaje de desempleo.
De acuerdo con las cifras de Nutre Hogar, uno de cada tres niños pobres está desnutrido y esta situación se agudiza en las áreas de indígenas y de difícil acceso.
En las áreas rurales, el 63% de la población se clasifica como pobre, y en las regiones indígenas y de difícil acceso el 90% de la población es pobre.
Estudios realizados en Panamá sobre disponibilidad alimentaria nos indican que el país ha desmejorado la oferta de alimentación a su población.
Las causas son el incremento del costo de los alimentos, el escaso mejoramiento de los salarios y el desempleo.
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