Calderón y Bush acuerdan agilizar plan contra el crimen organizado

Los presidentes de México, Felipe Calderón, y de EE.UU., George W. Bush, coincidieron hoy en agilizar la instrumentación de la Iniciativa Mérida dirigida contra el crimen organizado, según una fuente oficial.

Durante una conversación telefónica, Calderón reconoció el respaldo que Bush dio para que se aprobara en el Congreso estadounidense este plan contra la delincuencia organizada, según un comunicado de la Presidencia mexicana.

La semana pasada, el Congreso de Estados Unidos aprobó la Iniciativa Mérida y este lunes Bush la promulgó.

Por este plan, Washington dará en el primer año de instrumentación a México y Centroamérica 465 millones de dólares en equipo y capacitación para combatir el crimen organizado.

La Presidencia de México indicó en un comunicado que la Iniciativa Mérida "constituye una señal del compromiso con el que ambos países combaten al crimen organizado, así como de la profundidad existente en la cooperación y la corresponsabilidad que desarrollan entre ellos".

El gobernante de Estados Unidos reconoció en su conversación con Calderón la determinación con la que el mandatario mexicano ha encabezado la lucha contra la delincuencia, según el texto oficial.

Además, Bush confió en que la Iniciativa Mérida "intensifique el esfuerzo conjunto en ambos lados de la frontera a favor de la seguridad de México y de Estados Unidos", agregó el comunicado.

Calderón señaló que uno de sus principales objetivos es mejorar la capacidad y la tecnología de la Policía Federal, con miras a seguir desmantelando la red operativa y financiera del crimen organizado.

El mandatario dijo en su conversación con Bush que si bien la lucha será larga y conllevará costos, la batalla contra la delincuencia será ganada por los mexicanos.

Anunció que para ello continuará con el esfuerzo emprendido en esta materia, con el fin de fortalecer la salud y la tranquilidad de las familias mexicanas y estadounidenses.

La aprobación de la Iniciativa Mérida coincide con una escalada de violencia atribuida al crimen organizado que, según fuentes extraoficiales, ha causado 2.000 muertes en lo que va de 2008 frente a los 2.700 fallecimientos registrados el año pasado.

Este viernes, en el estado de Sinaloa (norte), cuna de los principales capos de las drogas, se reportaron una decena de muertes en acciones relacionadas con el narcotráfico.

En Culiacán, capital de Sinaloa, tres cuerpos decapitados aparecieron hoy junto a un mensaje amenazador dirigido al narcotraficante Arturo Beltrán Leyva, y horas más tarde sicarios mataron en la misma urbe a dos policías y a un civil.