Joven apasionado por el arbitraje
- Francisco Paz
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Desde niño arbitraba juegos. A su corta edad, está entre los réferis más jóvenes del mundo. Julio Anaya ama el trabajo que hace y está convencido de que si se hace bien, ayuda a que el deporte crezca y gane más apoyo para su desarrollo.
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Julio Anaya durante un partido de la Liga Kiwanis de baloncesto en el 2006. Archivo
El deporte no solamente brinda satisfacciones a los que lo practican, sino también a los que trabajan para que se cumplan sus reglas.
En este tópico, se ha abierto camino Julio Anaya, un joven árbitro de baloncesto que, a sus 26 años, es uno de los dos panameños que cuenta con licencia internacional de la Federación Internacional de Baloncesto (Fiba).
A pesar de su edad, Anaya ya cuenta con 15 años de experiencia en su campo. "Vivía al lado del gimnasio Gringo de la Guardia, en Parque Lefevre; comencé jugar a los 10 u 11 años y todavía no puedo decir qué me llevó a arbitrar a esa edad a los niños que eran menores que yo", confesó.
A Anaya le fue gustando cada vez más lo que hacía y fue pasando de dirigir juegos de minibaloncesto a las categorías juveniles y femeninas, siempre tratando de participar como jugador.
Al final, el arbitraje pudo más y cuando llegó a la mayoría de edad optó por concursar para la licencia internacional. "Panamá se quedaba sin árbitros internacionales, la mayoría de los que estaban activos en el momento llegaban a la edad del retiro, que en Fiba son los 50 años".
El más joven
Anaya se convirtió, en su momento, en el árbitro de baloncesto más joven del mundo y fue tomado de ejemplo por la Fiba para que otros se interesaran.
Y esta ocupación lo ha llevado a recorrer el mundo, en torneos locales, regionales y hasta en campeonatos mundiales de categorías inferiores, a tal punto que a pesar de terminar su carrera de ingeniero marítimo portuario, todavía no piensa en ejercerla.'
26
años es la edad de Julio Anaya, quien llegó a ser, en su momento, el árbitro de baloncesto más joven del mundo.
11
años fue la edad a la que comenzó a dirigir juegos de minibaloncesto, en un gimnasio de Parque Lefevre.
En estos momentos se encuentra en Canadá para el premundial Sub-18 y posteriormente asistirá a partidos eliminatorios para el Mundial de China 2019, para después dirigir en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en Barranquilla, Colombia.
Ha sido invitado para pitar juegos en la liga profesional de Venezuela y para participar de los campamentos de verano que organiza la NBA estadounidense.
Su aspiración es llegar a dirigir partidos de baloncesto de los Juegos Olímpicos, lo que es equivalente al mundial para sus colegas del fútbol.
Formación
Para ser un árbitro joven, aún no ha tenido ninguna mala experiencia por sus decisiones con jugadores o técnicos, sin embargo, en su preparación está la parte sicológica, además de la física y ética.
"No es tanto tener la llamada correcta, sino esperar la reacción de las personas, los jugadores, entrenadores, porque muchas veces puede ser la llamada correcta, pero la persona no la acepta, entonces, en la medida que podamos manejar la situación y no frustrarnos, se hace bien el trabajo", sostuvo.
Futuro
Para el joven ligado al baloncesto, el renacer de este deporte en Panamá, luego de problemas en su dirigencia que lo llevaron hasta ser suspendido de competencias internacionales, ha sido positivo.
"La selección mayor sabemos que ya está un poco veterana, pero se ve que los jugadores jóvenes que están incorporándose lo están haciendo en un nivel bastante óptimo, algunos desarrollados aquí, otros con parte de desarrollo fuera del país", destacó.
El trabajo con las categorías menores ya está empezando a dar resultados, consideró, al tomar como ejemplo a la Sub-18, que mañana inicia su participación en un premundial.
"Las competencias intercolegiales que se están desarrollando les permiten a ellos jugar día a día. Algunos que se destacan en ese nivel tienen la oportunidad de obtener becas en el extranjero y se desarrollan de una forma más rápida, y al venir acá elevan el nivel de los atletas que están acá", explicó.
Apoyo
El reforzamiento de la preparación de los árbitros en todas las disciplinas deportivas es fundamental para que estas sigan creciendo, de acuerdo con Anaya.
Sobre su deporte, el árbitro relata que se ha ido trabajando, principalmente, en tratar de fortalecer la liga profesional, que es el eslabón que une lo local con lo internacional.
"Eso favorece el espectáculo, favorece al fanático que lo presencia y que los jugadores se desarrollen mejor, de tal manera que la competencia mejore", explicó.
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