Semana 15: Maldiciones en la NBA
Esos Clippers ahora son un equipo que temer en la Conferencia Oeste.
Semana 15: Maldiciones en la NBA
Los Clippers de Los Ángeles son conocidos como la "franquicia maldita de la NBA" por la cantidad de lesiones que han sufrido sus jugadores en momentos críticos y terribles decisiones gerenciales. Un equipo que nunca ha alcanzado las Finales de Conferencia, uno cuyo ex propietario racista hostigaba a sus jugadores; y si nos remontamos hasta la década de los 80, ese hombre, Donald Sterling, trasladó la franquicia de San Louis a Los Ángeles, así invadiendo el territorio de una de las franquicias más galardonadas, sin el permiso de la NBA.
Esos Clippers ahora son un equipo que temer en la Conferencia Oeste. Después del horrible desempeño en la postemporada anterior; este año están en trayectoria para ser uno de los mejores equipos en la siempre despiadada Conferencia Oeste. Kawhi Leonard ha jugado la mayor cantidad de partidos consecutivos desde la temporada 2016-2017, y junto a un motivado Paul George, son de los mejores dúos en la NBA. Con la última adición de Rajon Rondo, llenaron el vació de un líder con gran carácter que dirija las tropas como comandante en cancha.
Un largo camino ha recorrido esta franquicia, desde Bob McAdoo, Elton Brand y la eléctrica, pero decepcionante era de "Lob City" con Chris Paul, Blake Griffin y DeAndre Jordan; hasta un buen futuro cercano con Leonard y George..
Un caso menos positivo de una franquicia "maldita" es la de los Minnesota Timberwolves. Al comenzar operaciones en 1989, el joven equipo no encontró un líder de manada hasta que el virtuoso alero-pívot, Kevin Garnett, arribó en 1995. Recién salido de su preparatoria, Minnesota lo escogió con la quinta selección, la mejor decisión en la historia de los Timberwolves. Con sus espectaculares talentos, expuestos desde que pisó una cancha, impulsó a la franquicia lo más lejos que pudo.
En 1998, Kevin firmó el más grande contrato de la historia, unos 126 millones pagados entre 7 años. En ese momento cometió el peor error de su carrera, ya que a pesar de no contar con ningún otro jugador del mismo calibre, prestó los mejores años de su carrera a un equipo sin esperanza de alcanzar una victoria de campeonato. En 1998, el dueño, Glen Taylor, firmó al agente libre Joe Smith por un año a 1 millón de dólares. ¡Qué buena oferta! Este proceso se repitió 2 veces más, ya que ambos acordaron conseguir los "derechos" del jugador, para que su salario no impactara la planilla de la franquicia.
La NBA descubrió esto y castigó a los Timberwolves quitándoles 3 piques en la primera ronda por tres años, removiendo así, su capacidad de traspasar por un gran jugador. Garnett durante todo ese tiempo siguió jugando como superestrella. Galardonado como Jugador Más Valioso, Jugador Defensivo del Año, All Star y todos los demás premios, pero nunca se esperaba nada de su equipo.
La temporada más importante en Minnesota fue la de 2004, donde perdieron las Finales de Conferencia contra los Los Angeles Lakers en 6 partidos. Esa fue la última vez que Garnett llegó a la postemporada portando un uniforme de los Timberwolves. Fue traspasado a los Boston Celtics en 2008, e inmediatamente ganó su tan merecido campeonato.
Otro gran alero-pívot que nunca logró nada en la franquicia fue Kevin Love, tal vez no lo recuerden, pero era el mejor jugador de su posición. Por suerte fue traspasado en 2015 a Cleveland y dos temporadas después, venció a los Golden State Warriors junto a LeBron James y Kyrie Irving.
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Actualmente tienen al excelente centro Karl-Anthony Towns, el gran base D'Angelo Russell y el prometedor escolta Anthony Edwards. Los Wolves solo han alcanzado la postemporada una vez desde que KG los lideró a las Finales de Conferencia hace casi 18 años. Esperemos que el nuevo dueño, Alex Rodríguez, mejore el rumbo de esta, francamente, terrible franquicia.
Los dejo con esto: ¿Cómo ustedes manejarían una franquicia deportiva multi billonaria? Hasta la otra semana, en Desde el Tabloncillo.