economia
Nicaragua y Unión Fenosa fumarán la pipa de la paz
Leonardo Machuca G. - Publicado:
LA ELÉCTRICA española Unión Fenosa y el Gobierno de Nicaragua se preparan a fumar la pipa de la paz, tras recias disputas y amenazas que subieron de tono desde que asumió el poder el sandinista Daniel Ortega.Las partes, que se amenazaron mutuamente con juicios millonarios, arbitrajes, multas y expropiaciones, suscribirán un memorando de entendimiento antes del 31 de julio próximo, en Madrid, que prevén ponga fin al conflicto.Así lo anunciaron autoridades nicaragüenses y fuentes de Unión Fenosa, en Madrid, donde se llegó al acuerdo, favorecido, al parecer, por el propio Rey Juan Carlos de España, según aseguró Ortega el pasado fin de semana en un mitin en Managua.Las diferencias entre Unión Fenosa, encargada de distribuir la energía eléctrica en Nicaragua, y el presidente Ortega, comenzaron antes de que éste asumiera el poder, el 10 de enero pasado.En 2006, año en que se celebraron las elecciones que ganó Ortega, coincidió con la profundización de una crisis energética, que ocasionó escasez de agua potable y del servicio de luz.Eso generó protestas callejeras, alentadas por sectores afines al entonces opositor y ahora gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).La generación de energía se convirtió en tema esencial de la pasada campaña electoral y las promesas de "cero apagones" y "poner en cintura" a Unión Fenosa fueron parte del menú electoral sandinista.Unión Fenosa, dueña de las distribuidoras Dissnorte y Dissur en Nicaragua, intentó explicar que la escasez y los cortes de energía eran ocasionados por la capacidad de generación energética y no por problemas de distribución, su única responsabilidad.Para atajar el problema, un déficit de 100 megavatios, el Gobierno sandinista distribuye a precios módicos bombillas de bajo consumo, importadas desde Cuba y Venezuela, con el fin de ahorrar unos 60 megavatios.También habilitó varias plantas generadoras donadas por el Gobierno venezolano de Hugo Chávez que funcionan con diesel, que igualmente aporta ese aliado de Ortega, pero que solo generan 45 megavatios.La población mantuvo hasta la semana pasada protestas callejeras para exigir el retiro "inmediato" de Unión Fenosa y el retorno al control estatal, tras seis años de privatización, con el juicio de arbitraje entablado por el Instituto Nicaragüense de Energía (INE, ente regulador) contra la eléctrica española, por "incumplimiento" del contrato de concesión, como telón de fondo.La ley otorga a la eléctrica española privilegios en la compra de energía a las empresas estatales, a través de créditos blandos, entre otros.El Gobierno distribuye a precios módicos bombillas de bajo consumo, importadas desde Cuba y Venezuela.