Panamá está huérfana de políticas para la producción

La crisis en la que se encuentra el sector agrícola es un problema de vieja data, sin embargo, el gobierno de Juan Carlos Varela no ha implementado políticas de Estado que ayuden a mejorar la situación, por lo que empresarios y productores consideran que su administración es la peor de los últimos años.

De acuerdo con la opinión de los empresarios, reflejada en el pilar Eficiencia del Mercado de Bienes del Índice Global de Competitividad, Panamá tiene hoy la peor política agrícola de los últimos diez años.

El país ocupó la posición número 120 de 138 economías, según el Foro Económico Mundial, organismo que mide este aspecto de la economía a través del indicador denominado Costo de la Política Agrícola.

Augusto Jiménez, presidente de la Asociación de la Comunidad Productora de Tierras Altas (ACPTA), afirmó que el actual gobierno no ha hecho nada para corregir los problemas.

"Panamá está huérfana en materia agropecuaria y cada día somos menos los que estamos en el campo", manifestó.

En el rubro de la cebolla, se sembraban 1,160 hectáreas en el año 2008, de las cuales, 800 correspondían a Tierras Altas, con 560 productores; sin embargo, el 2016 cerró con 126 hectáreas y con 79 productores, según las estadísticas de la Asociación de Productores.

Mientras, las hectáreas sembradas en papas y cebolla han disminuido, ya que anteriormente se producían 1,200 hectáreas, y ahora solo hay 400 hectáreas.'

Datos

$1,071 millones ha aportado el sector agrícola al producto interno bruto (PIB) del país, disminuyendo 1.2 por ciento, en comparación con el 2015.

138 es la posición que ocupa Panamá en el pilar Eficiencia del Mercado de Bienes del Índice Global de Competitividad.

35 mil hectáreas han dejado de sembrar los productores.

"Los intereses económicos son muy fuertes, y el productor nacional ha quedado abandonado totalmente, y solo nos queda esperar a ver quien ganará las próximas elecciones presidenciales", expresó.

Agregó que el sector agro es la segunda mano de obra que otorga empleo directo en el país con 253 mil, solo por detrás de la construcción.

Rubén Ceballos, productor arrocero, coincide con Cruz y Jiménez en que el Gobierno no ha sabido resolver el problema, lo que ha provocado que la situación se agrave.

"Aquí no se ha hecho nada en política de Estado porque toca los intereses de los importadores y personas que apoyan a las campañas", argumentó.

Para el 2016 se aprobó la importación de 1.3 millones de quintales de arroz para que no hubiera un desabastecimiento, algo que al final no se cumplió y se importaron 1.8 millones, según los arroceros.

Los productores han señalado que hasta octubre del presente año no se deben realizar importaciones de arroz porque hay suficiente producción nacional.

Actualmente, se han cosechado más de 6 millones de quintales de arroz en más de 62 mil hectáreas de las 66 mil pactadas con rendimientos de 104 quintales por hectárea, según el inventario actualizado del ciclo agrícola 2016-2017.

Panamá ha perdido más de 35 mil hectáreas de producción de alimentos desde el 2006 a la actualidad, por lo que dependemos mucho de las importaciones, según los productores.

Rogelio Cruz, presidente de la Unión Nacional de Productores, dijo que la situación en la que se encuentra el sector agrícola tiene un arrastre de hace 30 años y todo se debe a que no se les da seguimientos a los planes.

A juicio del productor, cada cinco años, el gobierno de turno viene con un librito nuevo y no hay un seguimiento y compromiso de Estado con el sector agro.

"Necesitamos que los planes sean a largo plazo y que se considere al sector agrícola como una fuente de riqueza y crecimiento en el país", manifestó.

Considera que hacen falta más políticas de Estado para este importante sector que aporta al producto interno bruto del país.

Cruz solicita a las autoridades que implementen políticas agrocomerciales establecidas y que las importaciones no sean en tiempo de cosecha para poder asegurar la venta de la producción nacional.

En el 2016, el aporte del sector agrícola al producto interno bruto (PIB) del país fue de 1,071 millones de dólares, una baja de 1.2%.