Diego Maradona se niega a entregar a su hija mayor en el altar
- Redacción/10deportivo
El jugador asegura que su primogénita no va a ser ni la primera ni la última novia que se case sin la presencia de su padre.
Maradona no dará su brazo a torcer.
El astro argentino Diego Armando Maradona vuelve a estar bajo la lupa debido a su convulsa vida personal. Resulta que ahora el 10 aseguró que no entregará en el altar a su hija mayor, Dalma Maradona.
La decisión de Maradona se debe a que su actual pareja, Rocío Oliva, y sus hijas (de un matrimonio anterior) no mantienen una buena relación.
"Rocío no va a ir al casamiento de Dalma, yo tampoco. Mi mujer es Rocío y si ella no está invitada, yo no voy. Están diciendo que yo quiero armar la lista, por favor. Yo no invito a nadie, lo único que digo es que mi mujer tiene que estar en el casamiento o yo no voy", explicó el exjugador del Nápoles.
La hija de Maradona se casará el próximo mes de abril y aunque todavía hay tiempo para que el "Pelusa" reconsidere su decisión, él cree que en todo caso su actitud no supone el fin del mundo.
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"Ahora se casa Dalma y no va a ser ni la primera ni la última novia que se case sin la presencia de su padre. Sabes cuántas novias pasaron por esto y cuantas van a pasar. Para mí es muy doloroso, a ella la llevo tatuada en mi piel porque la amo, como a Gianinna y a todos mis hijos, me duele en el alma tener que tomar esta decisión, pero no queda otra. Así quieren jugar y si algo hice en mi vida es jugar", comentó Maradona en un programa argentino.
La postura de Diego, conocida desde hace rato, provocó la molestia de su expareja y madre de Dalma, quien ironizó sobre la ausencia del galardonado exfutbolista.
Ante sus palabras, Diego expresó su enojo y aseguró que la madre de sus hijas es una oportunista.
“No entiendo cómo puede hablar de una persona cuando está imputada por desvalijar mi patrimonio, yo no olvido que mientras yo me moría, mientras mis hermanas me lloraban, ella compraba departamentos”, confesó Maradona.
Al parecer Maradona no cambiará tan fácil de opinión y será su hija la que tendrá que dar su brazo a torcer, si quiere a su padre en su boda.
“Yo no cambio, no me cambian, soy siempre Diego. Sin mi mujer no voy a ningún lado”, precisó.
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