Capitán sueco, dispuesto a perderse el nacimiento de su hijo por el juego de cuartos de final
- Moscú/EFE
El jugador dijo que su mujer es muy fuerte y que no se perderá el partido contra Inglaterra.

Andreas Granqvist es el líder del equipo.
El capitán sueco Andreas Granqvist estará disponible para el partido de cuartos de final ante Inglaterra pese al inminente nacimiento de su segundo hijo, programado para el pasado martes y que se ha retraso.
El defensa central de la selección sueca no descarta viajar para conocer a su hijo pero al mismo tiempo ha confirmado su disponibilidad para el partido del sábado en Samara ante los ingleses.
"Conocíamos la situación antes del Mundial pero mi mujer es muy fuerte y no me perderé el partido contra Inglaterra", ha dicho en The Guardian el central de 33 años, recientemente fichado por el Helsingborg de la liga sueca tras cinco años siendo líder de la zaga del Krasnodar ruso.
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Suecia e Inglaterra se medirán a orillas del Volga en la sexta localidad más poblada de Rusia con ganas de reencontrarse con su pasado. Ambas firmaron su mejor Mundial en casa: Inglaterra alzó el trofeo ante su público, en Wembley; ocho años después de que Suecia quedara subcampeona en el torneo que organizó en 1958.
En Samara buscarán una semifinal que les suena al siglo pasado y que los nórdicos jugaron cuatro veces; y los británicos, dos. Con enfoques opuestos. Todos los ingleses juegan en casa, mientras la totalidad de la representación sueca lo hace fuera. Cinco de ellos, además, lo hicieron esta temporada en la 'Premier'.
Suecia, que entró en Rusia 2018 a través de la repesca -le cerró el paso a Italia-, pasó ronda como primera, por delante de México, en el grupo F, en el que hizo las maletas antes de lo previsto Alemania. En octavos derrotó por la mínima a Suiza (1-0) y ahora buscará una semifinal que jugó por última vez en 1994, cuando acabó tercera, en el Mundial de Estados Unidos.'
Conocíamos la situación antes del Mundial, pero mi mujer es muy fuerte.
Inglaterra ganó ocho de sus diez partidos, sin derrota, antes de llegar a Rusia, donde entró en el cuadro del 'KO' al pasar segunda, por detrás de Bélgica, en el grupo G. En octavos, tras igualar a un tanto finalizado el tiempo reglamentario y la prórroga, eliminó a Colombia en los penaltis.
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